“El cargo del Jefe de la Administración Presidencial es uno de los más claves en nuestro sistema político. Muchas veces hemos escuchado: la Administración Presidencial es una sede del jefe de Estado y de la persona que la dirige, dependen muchas cosas”, subrayó el presidente de Belarús, Alexandr Lukashenko. Él caracterizó a Alexandr Kosinets como un dirigente experimentado y de carácter fuerte, que conoce muy bien su oficio. En algún tiempo, Alexandr Kosinets era rector de una de las principales universidades del país, así como el viceprimer ministro, dirigía las áreas más importantes de la política social, salud pública y cultura. Durante muchos años fue el gobernador de la provincia de Vítebsk.
El mandatario de Belarús considera que la iniciativa, energía, abnegación y visión política de Alexandr Kosinets son las cualidades, que le permitan dedicarse a nuevas responsabilidades e impulsar ell trabajo de la Administración Presidencial.
Hace falta señalar que el jefe del Estado cree que el trabajo con el personal es una tarea clave de la Administración Presidencial. “Mis exigencias son bien conocidas: el profesionalismo, el compromiso total y, lo que más importante, es el resultado. También añadiría: el servicio abnegado a los intereses de la gente”, dijo el líder belaruso. Además de eso, él subrayó que para los funcionarios públicos es totalmente inaceptable ser arrogante.
En opinión del presidente de Belarús, Alexandr Lukashenko, hace falta trabajar seriamente con el banco de datos de los jóvenes con talento creado en nuestro país: “Es la principal riqueza, con la que tenemos que trabajar activamente. Claro que no todos los jóvenes, pero muchos de ellos, próximamente serán funcionarios. Por lo tanto, tenemos que desarrollar un sistema adecuado de selección”.
Además de eso, el jefe del Estado señaló que hoy en día, el tema más importante es aumentar la responsabilidad de los funcionarios. “A esta altura, alrededor de nuestro país se está cambiando la situación, por lo tanto, los funcionarios deben mostrar más responsabilidad”. Según el mandatario belaruso, el así llamado factor humano se vuelve decisivo en cada puesto de trabajo: desde el trabajador o campesino común hasta el primer ministro.
Vladímir Khrómov
