Los médicos del hospital número uno de la ciudad de Minsk por primera vez están llevando a cabo una serie de intervenciones a fin de prevenir coágulos de sangre, que son peligrosos para la vida

Los médicos del hospital número uno de la ciudad de Minsk por primera vez están llevando a cabo una serie de intervenciones a fin de prevenir coágulos de sangre, que son peligrosos para la vida. Al romperse y al encontrarse en el torrente sanguíneo, ellos pueden bloquear un vaso sanguíneo, incluyendo del cerebro. La particularidad del nuevo método es que esta vez no es necesaria la participación de un cirujano y el uso de anestesia general. A su vez, cinco pacientes –hombres y mujeres de la edad media– se han recuperado muy rápidamente y han salido del hospital al segundo o el tercer día.


Se trata de un nuevo método endovascular e intravascular: la oclusión de la parte de la auricular izquierda (justo en este lugar más a menudo se forma un coágulo de sangre). Es la salvación en el caso de arritmias: aleteo auricular y fibrilación auricular.

Inicialmente los médicos recitaban a estos pacientes los medicamentos que hacían fluir más rápidamente la sangre. “Sin embargo, un cierto porcentaje de personas tenían efecto bajo o insuficiente tras su uso. Para algunos, estos remedios no eran seguros en absoluto, porque no sólo podían causar reacciones alérgicas, sino sangrado, cuenta el jefe de la oficina angiográfica del hospital número uno, independiente cirujano jefe endovascular del Comité de la Salud Pública del Gobierno de la ciudad de Minsk, Pável Chernoglaz. Por lo tanto, la única solución era operar. Pero si antes, tratando de prevenir esta enfermedad, los cirujanos realizaban una intervención compleja con la apertura del pecho u operaban sin bisturí con un endoscopio, hoy en día, ha aparecido una alternativa”.

En la parte superior del muslo, en la zona de ingle, el médico hace una pequeña incisión, introduce instrumentos médicos y bajo el control de los rayos X realiza una cirugía a través de la vena femoral y, después de la vena cava hasta la aurícula izquierda. En este lugar se pone el así llamado paraguas u oclusor, que se abre y llena el interior. En resultado, se pone una “tapita” segura. Por lo tanto, un trombo no tiene ningún chance de un dañar el corazón. Todo este proceso ocupa sólo de 40 a 50 minutos. A propósito, el costo de esta cirugía se lo asume en su totalidad el Estado, aunque el precio sólo del así llamado paraguas de salvación es de unos 10 mil dólares norteamericanos.

Anteriormente, las intervenciones de alta tecnología se llevaban a cabo exclusivamente en el Centro Nacional Científico y Práctico, “Cardiología”, y en el Centro Nacional Médico de la Oficina de Gestión del Presidente. A partir de ahora, los hospitales municipales de Minsk también tendrán la posibilidad de salvar a sus pacientes utilizando una nueva tecnología. Hace falta señalar que a esta altura cuatro especialistas del hospital número uno de la ciudad de Minsk utilizan esta tecnología avanzada.