
La pasiуn de crear vestimenta — en ellas es hereditaria, de parte de la madre y de la abuela. Y si alguien crece en los cuentos queridos, estas tres crecieron entre las queridas revistas de modas, que con йxito les reemplazaron los cuentos. Luego las hermanas comenzaron a “componer” independientemente... Junto con esto a Olga, a Elena y a Marina nunca se le ocurrнa, van o no a llevarse a la realidad sus fantasнas extravagantes, nunca dudaron que “todo esto debe usarse”. Su tal mencionada ausencia de aspiraciуn a agradar (que es propio de los verdaderos artistas, entre otras cosas) en combinaciуn con los conocimientos profesionales de las tradiciones populares (tras las hermanas mayores Marina estб terminando la Facultad de Cultura Popular de la Universidad Pedagуgica) logicamente asegurу a la uniуn artнstica Parfenуvich los primeros triunfos — al principio en el foro nacional de la moda de vanguardia “Mamont”, y despuйs en el conocido festival “El molino de la moda” que les trajo una prбctica en la escuela internacional de la moda “Esmod”. Despuйs de la cual, las hermanas definitivamente se convencieron: la estrategia de mayor йxito — es hacer aquello que a uno le gusta, sin mirar a las autoridades, sin el recelo que a uno “no lo van a entender”.
Cada una de ellas domina los antiguos oficios — el bordado, la tejedurнa, composiciуn con trozos, cesterнa, trenzado de paja... Hacer un gobelino o materializar la idea en cerбmica para ellas, valga la figura, es “un par de pequeсeces”. “Todo esto lo hemos estudiado con profundidad, e incluso no me imagino quй no podrнamos hacer”, — se encoge de hombros Olga. A ejemplo de las antiguas maestras, las hermanas Parfenуvich prefieren cortar la tela directamente sobre el modelo o por inspiraciуn, aunque los procedimientos tradicionales de las cortadoras de los talleres les son perfectamente conocidos. Lo que en general confirma una de sus ъltimas colecciones -”Metamorfosis”. En verdad, los pespuntes y las costuras ellas las ubican en lugares tan “incorrectos” que el resultado de esta creaciуn de vanguardia dificilmente admite una descripciуn verbal. El primer pensamiento que me llega a la cabeza cuando vн este constructor inconcebible de vaqueros negras y de un velo rojo-gris, — este es nuestro mundo en comъn, pero desde el punto de vista de la vestimenta... Por extraсo que parezca, incluso en Minsk se encuentran clientes para la “Metamorfosis”, personas osadas, que desean vestirla.
— Y no tiene nada de extraсo — para la hermana. — La gente trata de vestirse individualmente, con cada aсo que pasa hay mбs gente asн. Porque ahora hay elecciуn, y esto ayuda mucho al desarrollo del gusto. їSe acuerda del comienzo de los aсos 90 cuando todas sin excepciуn andaban en leggins, pijamas y en faldas onduladas polacas? Esto sucedнa porque no habнa elecciуn. Espйrese unos aсos mбs — verб como cambiarбn los habitantes de Minsk.
Es evidente, la receta del йxito de los diseсadores bielorrusos contemporбneos no es especialmente compleja. La educaciуn acadйmica y la actitud apasionada hacia sus raнces en los establecimientos de educaciуn superior siempre estuvieron a buen nivel. Agregemos acб la intrepidez de la nueva generaciуn y el sentimiento que a alguien esto le es necesario... Aunque de todas maneras es intrigante: їde quй manera de manera van a cambiar dentro de varios aсos?
Irina Gnъtkaya