En la historia Belaruso-Turcomana el destino de Alexander Potseluevsky tiene una línea separada

Como un belaruso aprendió el idioma turcomano

En la historia Belaruso-Turcomana el destino de Alexander Potseluevsky tiene una línea separada


Lamentablemente, el nombre de Alexander Petróvich Potseluevsky no está inscrito en la “Enciclopedia de Belarús”. Sin embargo, los enciclopedistas pueden argumentar por qué debería estar. Alexander Potseluevsky nació en la provincia belarusa de Vítebsk y de todos modos es nuestro paisano. La patria del científico, lingüista, escritor y folclorista es el “pueblo de Bukmuyzha, condado de Rezhitsky, provincia de Vítebsk (ahora es el territorio de la República Socialista Soviética de Letonia)”. Es el extracto de la autobiografía del catedrático que hace unos pocos años su hijo, Eugeni Alexándrovich, me entregó. Vale la pena añadir que Alexander Potseluevsky nació “... en la familia de un maestro y era belaruso por su nacionalidad”. Por lo tanto, no debemos dudar. Seguramente con el tiempo, en las enciclopedias será inscrito el nombre de Alexander Potseluevsky, e incluso alguien en Belarús se le dedicará un libro. Al parecer, la historia de vida del señor Alexander no tiene idea intrincada, pero de cualquier modo vale la pena contarla.

¿En qué consistía la misión de Alexander Potseluevsky? Antes de llegar a Ashgabat (entonces, a propósito, la capital de la región de Zakaspiysk se llamaba Poltoratsk) él –joven del pueblo letón de Bukmuyzhi– algunos años vivió en Vítebsk. Su padre –maestro rural– aunque tenía dificultades materiales, decidió enviar a su hijo a estudiar en el gimnasio clásico de Vítebsk.

En 1914, Alexander ingresó en el Instituto de Idiomas Orientales Lázarev de Moscú. Estoy leyendo la autobiografía del científico: “Durante mis estudios en el Instituto Lázarev asistía el curso del idioma francés abierto en la sociedad, “Alianza Francesa”, así como el curso del inglés en la “Sociedad de acercamiento de Rusia con Gran Bretaña”. Mi principal especialidad es lingüista-turkólogo”. Así que Alexander Potseluevsky fue uno de los intelectuales de aquel entonces... Para entender a qué se refería él diciendo “lingüista-turkólogo”, es necesario revisar las páginas de su biografía científica: al graduarse del Instituto Lázarev, Alexander Potseluevsky “obtuvo una buena formación en el idioma turco, persa y árabe”. Mirando hacia el futuro, nos fijamos en una característica escrita por el mismo señor Potseluevsky. En la respuesta a la pregunta ¿qué idiomas extranjeros y de los pueblos de la Unión Soviética domina? él puso “leo sin diccionario y con diccionario el idioma alemán, italiano, polaco, latín, árabe, anatolio-turco y algunos otros; belaruso, letón, azerbaiyano, tártaro de Crimea, uzbeko, tayiko y algunos otros; domino bien el idioma francés, inglés, persa (farsi), ruso y turcomano”.

Desde el diciembre de 1918 hasta el junio de 1922, Alexander Petróvich enseñó el idioma inglés y francés en la filial de Vítebsk del Instituto Arqueológico de Moscú. Luego, un año más trabajó como el lector y el profesor en los cursos del departamento de educación de la provincia de Vítebsk. Con mucho cariño se acordaba de las clases que daban profesores del Instituto Lázarev. Probablemente, durante sus estudios, Alexander se dio cuenta de que para estudiar el idioma turcomano no había hecho mucho, sólo algunos pasos. En 1921, la filial de Vítebsk del Instituto de Moscú mandó a Alexander Potseluevsky a realizar un viaje de trabajo a Tashkent. Alexander Petróvich estuvo trabajando como el profesor del idioma persa en los cursos de idiomas orientales para los militares y conoce muy bien todas las actividades del Instituto Oriental de Turquestán. En las calles de Tashkent ansiosamente aprendió el dialecto de la gente local e intentó hablar en el idioma uzbeko.

En el octubre de 1923, se lo invitó el Servicio de Educación de Ferrocarril de la Asia Central en Ashgabat para ocupar el cargo de instructor-metodista. Entonces el joven tenía 29 años y él no sabía que le quedaba vivir sólo un cuarto de siglo. Pero sabía muy bien qué hacer. ...Entonces el país carecía mucho a los profesores de idiomas extranjeros. Alexander Petróvich daba clases de inglés, francés, persa y turcomano (que acababa de aprender) en la escuela ferroviaria de Ashgabat de segundo grado Ushinsky, la escuela del segundo grado Nekrásov, la escuela Lunacharski y en la escuela persa. Y también enseñaba en los cursos de comandantes y el conocimiento comercial. Parece que Alexander Potseluevsky trabajaba por 24 horas al día. Pero él como toda la gente tenía familia, cuatro hijos. Además de eso, desde Vítebsk vino su padre viejo y enfermo. Pero los idiomas fueron su pasión más grande y su aprendizaje fue el principal propósito de su vida. Le atraía mucho el idioma turcomano, que antes él no conocía... Lamentablemente, había poca literatura para poder aprenderlo.

Y le ayudó mucho el catedrático Samóilovich del Instituto Lázarev. Cuando estudiante, hizo una tesis bajo el título, “La experiencia de la investigación lingüística del dialecto teke del idioma turcomano”, que incluyó un diccionario breve teke-ruso. Entonces la obra fue apreciada mucho y el joven científico fue galardonado con la medalla de oro de la Universidad de San Petersburgo. Pero eso fue en 1903... Más tarde Samóilovich, aunque participaba en expediciones dialectológicas en Turkmenistán, no se dedicaba mucho a los problemas del idioma turcomano… A partir de la época estudiantil Alexander Potseluevsky aprendió mucho de su profesor y trató de llegar a aprender el idioma. Paseaba por mercados, visitaba pueblos cercanos y lejanos, invitaba a participar en las expediciones a los colegas del ministerio de cultura de Turkmenistán, donde ya estaba trabajando. Grababa el idioma de la gente local, sus dialectos y seleccionaba de los mismos las palabras típicas de varias tribus turcomanas. Todos los años, de dos a tres meses el investigador se los pasaba en las zonas más remotas del desierto de Karakum. En 1927, realizó la expedición a la tribu yomudes y gauquelines. En 1928, a la tribu anauli. En 1929, a la tribu ersarintsy. En 1930, a la tribu salyry a sariky. En diciembre del mismo año 1930 a la tribu nohurli...

Al pueblo de Nohur Alexander Potseluevsky regresó también durante la Gran Guerra Patria... El periodista de Moscú, Nikolai Golovkin –que nació en Ashgabat– al conocer sobre mi interés hacia la persona de Alexander Potseluevsky, en seguida me dijo: “Mi mamá tomó parte de aquella expedición al pueblo de Nohur...” Llamé a Ashgabat. La doctora en las ciencias filológicas, Yevgenia Yershova, desde hace mucho tiempo ya se ha retirado, pero su voz en el teléfono sonó muy joven y alegre:

— Entonces yo era estudiante del instituto pedagógico, donde Alexander Petróvich era el jefe del departamento del idioma turcomano y lingüística general. Lo que nos sorprendía mucho eran sus capacidades excepcionales. Sin embargo, cuando jóvenes no lo apreciábamos tanto. Parecía que en adelante tendríamos mucho tiempo para mover montañas en la ciencia. Y cuando grabábamos los dialectos y el folclore en el pueblo de Nohur, el catedrático nos impresionaba mucho por hablar con los agricultores y trabajadores locales en su propio idioma, como si muchos años viviera en este pueblo entre los miembros del tribu nohurli...

Pero volvamos al año 1920... Alexander Potseluevsky se metía en todos los aspectos del desarrollo, o más bien la formación del idioma turcomano. En agosto de 1926, el científico publicó en el periódico, “Chispa de Turkmenistán”, el artículo, “Reforma del alfabeto turcomano”. Uno tras otro fueron publicados los artículos científicos y populares, así como los libros del científico. Ya en 1929, fue editado su libro de textos, “Guía para estudiar el idioma turcomano” (como un anexo “Breve diccionario turcomano”). Pocos años después el belaruso editó por su propia cuenta el “Proyecto de reforma de la ortografía del idioma literario de Turkmenistán”.


...Recogiendo la información sobre el científico, escribí a varias personas. En Moscú el nombre de Alexander Potseluevsky es bien conocido en el Instituto de Lingüística de la Academia Rusa de Ciencias, el Instituto de Estudios de Asia y África de la Universidad Estatal de Moscú, el Instituto de Idiomas Orientales... Además de eso, escribí a Ashgabat, donde él vivió y trabajó en la segunda mitad de los años ochenta del siglo veinte... Escribí a mis conocidos: escritores y científicos, y en la profundidad reprochaba a sí mismo por lo que entonces no presté mucha atención a la obra científica de Alexander Potseluevsky. También buscaba huellas de Ashgabat de otros compatriotas nuestros... Pero de todos los belarusos la figura de Alexander Potseluevsky es de mayor importancia para Turkmenistán. Y su muerte durante un terremoto –que tuvo lugar en 1948– fue una pérdida irreparable.

Justo entonces, en la noche de octubre en 1948, desapareció también el archivo personal del científico. Durante más de 25 años de duro trabajo –encaminado al desarrollo de la “estructura del idioma turcomano”– Alexander Petróvich logró publicar casi veinte libros y por lo tanto, creó una base científica para varias generaciones en cuanto al idioma turcomano. A principios de este siglo, en Ashgabat hicieron balances del siglo pasado y determinaron los nombres de los turcomanos, cuyos apellidos deberían ser inscritos en la historia con letras de oro. Alexander Potseluevsky esta entre ellos.

— ...En cuanto a los archivos del padre, cuenta el hijo del científico, sólo queda adivinar cuáles fueran los temas que él estaba estudiando en los últimos años. Las orientaciones específicas las proporciona una lista de publicaciones científicas, hecha por el padre en 1948, donde junto con otras obras aparecen los trabajos preparados a su publicación, pero que permanecieron inéditos. Se trata de diez ensayos dedicados al dialecto de las tribus, por un total de más de 300 páginas escritas a máquina y el trabajo de casi la misma cantidad de páginas, “Morfología de la lengua turcomana en una luz científica (formas sintácticas)”. Además de eso, en la lista está la “Colección de las canciones femeninas” en diez hojas de autor, la “Guía para el estudio del idioma persa”, “Materiales para la preparación de diccionario ruso-persa”. ¡Es una obra colosal!

Después del terremoto de 1948 la ciudad de Ashgabat fue recuperada relativamente rápido. La ayuda llegó también desde Belarús, aunque en nuestra región la gente tuvo que seguir tiempos duros de post guerra... A su vez, las colecciones de dialecto del científico, Alexander Potseluevsky –desaparecidas en aquella terrible noche de octubre– demoraron en recuperarse durante décadas. Pero el tiempo no se detiene y los hallazgos científicos de nuestro compatriota, sus hipótesis y creencias siguen su desarrollo en las obras científicas de los estudiantes de Alexander Petróvich. Muchos de ellos se convirtieron en los doctores de ciencias. Además de eso, siguen viviendo las huellas que dejó en la patria de Majtumkuli el belaruso, Alexander Potseluevsky.

Ales Karlyukévich
Заметили ошибку? Пожалуйста, выделите её и нажмите Ctrl+Enter