En el espejo de la actualidad
05.05.2015 15:57:44
A principios de mayo los periodistas belarusos tienen una época agitada. El 1° de mayo se celebra el Día del Trabajo. El 5 de mayo es el Día de Prensa. El 7 de mayo los belarusos festejan el Día de Radio y Televisión y el 9 de mayo el Día de la Gran Victoria. Son muchas fiestas, dos de las cuales son profesionales.
Todo el mundo celebra estas fiestas, pero los periodistas tienen más trabajo: salen a las calles, hablan con la gente, hace llamadas telefónicas. Los días el 1° y 9 de mayo los periodistas cuentan a todo el mundo cómo sus compatriotas celebran estas fiestas. A su vez, el 5 y 7 de mayo ellos escriben informes y cuentan sobre los éxitos de sus colegas periodistas. Pues según la tradición de muchos años, estos días en el Ministerio de Información y en la Unión de Periodistas de Belarús destacan a los mejores autores con las mayores adjudicaciones profesionales: la estatuilla, “Litera de Oro”, y una insignia de honor, “Pluma de Oro”. Muchos de los colegas –de los que voy a contar en adelante– ya tienen estos símbolos de reconocimiento de sus éxitos en la profesión. Pero esto no es tan importante en sus vidas.
Las personas –que toman la decisión de escribir o entrevistar– comienzan a hacerlo en una edad temprana. Su motivación principal es compartir con los demás lo que ellos ven alrededor. Pues la mayoría de nosotros sólo ve el mundo que nos rodea y nada más. A su vez, mucha información sobre lo que está sucediendo en el país y en el mundo nosotros la recibimos de los periódicos y de la televisión. En realidad, esta gente sólo se destaca por un rasgo bien característico: lo que ve, no lo guarda en el pozo de la memoria, sino pone en un papel o graba en la película para transmitir a miles o millones de sus compatriotas, así como a los que viven en el exterior y que aún no saben sobre algo nuevo, inusual e importante.
Vamos a conocer más de cerca a estos cronistas de nuestro tiempo.
Olga Sákharova. La mejor guía por la ciudad de Minsk
Olga Sákharova en el canal de televisión STV ocupa un cargo alto. Es la directora de programas de arte, y el público la conoce como la presentadora del programa, “Minsk y los vecinos de Minsk”. En mi opinión, su segundo oficio es más importante. De hecho, Olga cumple con una función única: ella es la guía por la ciudad de Minsk. Durante casi diez años de la existencia de su proyecto en la televisión nacional ella recorrió toda la capital belarusa, al pasar por todos los rincones. A mi parecer que al ver sus programas, incluso si uno está viviendo en Nueva Zelanda, fácilmente puede conocer la ciudad tan a fondo que una vez al encontrarse en la capital belarusa, podría convertirse en el mejor experto que cualquier vecino local.
Olga Sákharova nació en Minsk. Aunque esto podría no suceder nunca, cuenta la periodista:
— Es cierto, nací en Minsk. Aunque estaba previsto que yo naciera en la capital de la República de Komi, Rusia: Syktyvkar, donde mi padre sirvió en el ejército. Mi madre un poco antes de mi nacimiento decidió visitar a sus familiares en Minsk y al llegar, de inmediato fue hospitalizada.
Olga Sákharova es una de aquellas personas que cree que todos los esfuerzos del trabajo de periodista no son vanos. Además de eso, ella siempre está dispuesta a conocer la opinión de la gente en cuanto a sus programas. Pues sus historias conmueven a las autoridades locales y los vecinos, obligándoles juntos resolver problemas comunes:
— Desde hace mucho tiempo el programa, “Minsk y los vecinos de Minsk”, es una especie de plataforma interactiva, donde la gente puede expresar sus deseos en cuanto al futuro de la ciudad. En el programa de Olga las autoridades dan respuestas claras a todas las respuestas.
Oleg Lukashévich.Cazando lo bello
Percibir que podría interesar al público y comprender que haría popular su programa es el rasgo característico del periodista de televisión, Oleg Lukashévich. Se hizo famoso gracias a una serie de reportajes dedicados a la búsqueda de las huellas en el extranjero de los grandes oriundos de Belarús: Marc Chagall en Francia, Ignacio Domeyko en Chile, Estanislao Augusto Poniatovski en Polonia y de muchas otras celebridades. Oleg recorrió todo el mundo y por primera vez mostró a los belarusos los lugares, donde pisaban la tierra sus compatriotas de reconocimiento mundial.
Oleg Lukashévich siempre tiene límites altos en su obra. Él quiere hacer y hace el mejor y original producto: ya sea en la televisión o una obra literaria. Después de viajar por Belarús, fue editado su álbum (en coautoría con su colega, Alexander Alexéev), “Patrimonio de Belarús”. En el mismo están recogidas las imágenes de las verdaderas obras maestras de la arquitectura del país. Al mismo tiempo, Oleg se presentó en el mismo como un buen fotógrafo. A esta altura, el álbum adorna las mejores bibliotecas del mundo: desde la de la reina de Gran Bretaña y hasta la del Papá de Roma. Y eso, según el personal de librerías del país, es lo mejor que puede comprar un viajero como un recuerdo sobre Belarús.
A Oleg Lukashévich se lo atrae mucho todo lo bello: historia, cultura, celebridades brillantes, obras maestras de la arquitectura, etc. Y él sabe cómo presentarlo en la pantalla y en las páginas de álbum. Él se alejó más allá del periodismo y está trabajando como una especie de diplomático, difundiendo los conocimientos sobre su país natal en todo el mundo, mostrando solamente su mejor lado.
Olga Makey. Cazando los hechos
Si Olga Sákharova durante muchos años sueña con volar en aviones (incluso quería ser azafata), su colega periodista del canal de televisión, Olga Makey, está volando muy a menudo. Así que ella viaja mucho a fin de poder hacer programas de todos los rincones del mundo sobre las negociaciones intergubernamentales entre Belarús y los países amigos.
Cabe destacar que hace unos años, Olga Makey fue galardonada con un prestigioso premio de la comunidad televisiva de Belarús: la estatuilla, “Televershina”, en la categoría, “Mejor Reportero”. Hizo informe sobre la llegada en el puerto de Odesa del primer buque con el petróleo venezolano para Belarús. Se encontró allí antes que nadie. Sólo al día siguiente vinieron los representantes de otros medios de comunicación.
Al principio Olga contaba historias entretenidas y luego comenzó a cubrir temas serios. A Olga se le encanta trabajar mucho:
— Cuando tomo vacaciones, me siento muy aburrida. Me gusta moverme, tratar de hacer muchas cosas, no me asustan para nada las situaciones de emergencia, cuando tengo que improvisar en vivo. Buscando algo exclusivo, estoy dispuesta a cualquier cosa. ¿Por qué soy tan atrevida? Cuando niña, practicaba el deporte hípico. Me hice candidata para el maestro en la superación de los obstáculos. Lo que a veces puede ser muy traumático. Gané el título de vice campeona del país. Siendo pequeña, todos los días me iba a entrenar la base deportiva que se situaba en afueras de la ciudad de Molodechno, a 35 kilómetros de mi casa en Minsk. Pedía llevarme a la gente desconocida. ¿Se imagina? Mentía a mi madre, diciendo que me iba en ómnibus. Porque el transporte regular iba allí una vez al día, en una hora incómoda para mí...
Sobre Olga, yo diría, parafraseando la conocida expresión, que “estas personas podrían ser incluso astronautas” Y en el periodismo la gente de este tipo es muy apreciada. Pues además de su gran laboriosidad, Olga Makey también se ve muy bien en la cámara. Cómo se dicen los profesionales, la cámara la ama. Sin esto en la televisión es imposible tener éxito, no importa lo que uno tiene otros talentos.
Ales Karliukévich. El pescador en la orilla de la literatura
¿Qué impresiona, cuando uno pasa por la oficina de Ales Karliukévich, el redactor jefe y el director de la editorial, “Zviazdá” (en el idioma belaruso estrella — Aut.), y del diario, “Zviazdá”? Es su escritorio que no se parece a ningún otro en el país. En el mismo permanecen muchos libros, revistas y periódicos. Y todo eso no sólo son productos de la editorial, “Zviazdá”. Ales Karliukévich tiene tiempo para leer todo lo que se publica sobre Belarús en el país y en el extranjero. Y a pesar de la presión del tiempo, el redactor jefe y el director se ve obligado a resolver muncho problemas económicos relacionados con el trabajo creador. Además de eso, él escribe comentarios sobre muchos libros.
Probablemente no haya nadie quien mejor que Ales Karliukévich conoce el mundo de libros dedicados a nuestro país, que escriben todos los días muchos científicos. Una de las mayores pasiones de Ales Karliukévich es conocer su tierra natal, así como penetrar junto con otros autores a las profundidades insondables de nuestra historia. Además de eso, Ales Karliukévich lleva a cabo sus propias investigaciones científicas. Por lo tanto, sus libros son muy esperados por miles de lectores belarusos no sólo adultos, sino también por los niños. El señor Karliukévich –siendo una personalidad multifacética– escribe mucho para los chicos.
Pero lo más importante es que Ales Karliukévich –siendo también el editor– busca verdaderas obras maestras escritas por sus colegas –historiadores y escritores locales– y se los publica en el periódico, “Zviazdá”. Siendo muy buen profesional, él busca el mejor producto de información para ser el primero en llevarlo a miles de lectores.
Tatiana Sivets. La poetisa
Estoy seguro de que a Tatiana se la envidian muchos poetas hombres. Ella es poetisa. Pero sólo algunas personas de las –que se dedican a la poesía– logran llegar a trabajar en la televisión. Es más convertirse en la presentadora de su propio programa. Es su gran suerte. Pero ella no abuse de lo que le ha dado el Dios: el talento propio. No recita sus poemas, sino entrevista a la gente interesante, es decir se dedica al periodismo clásico.
Hacer abrirse a las personas creativas, así como hacerlas ser sinceras y francas es todo un arte. A menudo, las personas con talento están cerradas, viven en su capullo y realmente no quieren abrir su alma al mundo. Se manifiestan sólo en su obra. A su vez, Tatiana Sivets, como nadie, conoce la psicología de la gente de la literatura y el arte. Pues ella también es la editora jefe del periódico, “Literatura y Аrte”, donde aparecen los nombres de los futuros clásicos de la literatura. La edición –que existe desde los años treinta del siglo pasado– se convirtió en una tribuna para muchos reconocidos escritores belarusos. Tatiana sigue trabajando en la selección del grano de la paja: de las mejores muestras de la palabra belarusa hasta ejercicios grafomanos. A su vez, el editor es el nivel más alto en la carrera periodística. Y mucha responsabilidad. Si uno muestra algún escepticismo hacia el verdadero talento, nunca podrá distinguir a un genio. Parece que Tatiana Sivets sabe aprovechar a full la oportunidad de conocer a un verdadero maestro.
Constantino Yumanov. La voz del pueblo
Unos conocen a Constantino Yumanov como uno de los organizadores de las fiestas empresariales, otros lo conocen como el DJ en la radio. Pero para mí él es, en primer lugar, el presentador de un programa popular, “Tiempito de Belarús”. Constantino Yumanov siempre es alegre y chistoso, pero al mismo tiempo, es un periodista muy inteligente. En mi opinión, es una combinación muy rara.
Siendo periodista, él se comunica directamente con la gente. Al programa, “Tiempito de Belarús”, en vivo llaman personas de todo el país y cuentan sobre sus preocupaciones. Y Yumanov les da respuestas que permiten ayudar a solucionar muchos problemas de la vida cotidiana.
Es sumamente importante subrayar que para Constantino su ocupación en la radio y en la televisión no sólo es un trabajo:
— Por primera vez salí al aire en 1998 y no podía ni siquiera imaginar que ligaría toda mi vida con la radio y la televisión. Las altas y bajas de mi crecimiento personal y profesional, así como las búsquedas insaciables de mí mismo me obligaron a pasar de una FM-estación a la otra y de un canal de televisión al otro, adquiriendo nuevos conocimientos y experiencias invaluables. Así me formé como persona creativa, logré establecer lazos de amistad. Así conocí a mi verdadero amor y me casé. Ahora estamos criando juntos a nuestro hijo. En el aire, está mi segundo hogar.
Liudmila Rublévskaya. Trabajando el día y la noche
Hace falta señalar que en algún momento la escritora, Liudmila Rublévskaya, también trabajó en el periódico, “Literatura y Arte”. A esta altura es la columnista literaria en el diario, “Sovéstkaya Belarús”. A partir de 2002, en el medio más importante del país la periodista narra a 400 mil lectores belarusos sobre lo que es mejor leer de la clásica nacional y mundial. Es una misión muy responsable. Pues si ella aconseja algo que no guste a la audiencia, recibirá por correo un montón de comentarios descontentos. Sin embargo, Liudmila tiene un gusto muy fino. Por lo tanto, se le envían no sólo las cartas con agradecimientos, sino también con las solicitudes de los autores principiantes de hacer comentarios en cuanto a sus obras.
Los comentarios literarios de Tatiana Rublévskaya son altamente valorados por sus colegas escritores. Sin embargo, lo más importante es que la misma Liudmila no sólo es la crítica literaria, sino también la autora de muchas novelas muy interesantes dedicadas a la historia de nuestro país. Sus obras no están publicadas en las páginas del periódico, sino se editan como libros separados, que se venden muy rápidamente. Tatiana Rublévskaya sigue escribiendo nuevas historias. Una vez la pregunté, cómo le alcanza el tiempo para todo: hacer comentarios literarios y escribir tomos con historias de aventuras. Ella me dijo lo siguiente:
— Lo hago al regresar de mi trabajo principal. Por lo general, en la noche.
¿No les parece una hazaña creativa? Creo que esto es una necesidad natural de un verdadero escritor: expresarse en el papel. Sin embargo, en el caso de la señora Rublévskaya hay un factor muy importante: sus pensamientos son apreciados por los demás y, por lo tanto, no se mantienen durante mucho tiempo en el escritorio, sino se publican y aparecen en las librerías.
No conozco a ningún otro periodista belaruso tan activo como ella. Eso la destaca entre los periodistas y escritores de nuestro país.
Tatiana Sulímova. Toda la fuerza del sexo débil
Durante muchos años sólo oía hablar ella Pero nunca la veía. Ella fue la estrella de una de las estaciones de radio de Minsk. Yo diría más: era la voz de una época entre dos milenios. Siempre era muy interesante oír lo que decía Tatiana Sulímova.
Ahora leo que ella escribe. En el periódico, “Sovétskaya Belarús”, ella se manifestó como muy buena publicista. En primer lugar, sus columnas literarias de autora están dedicadas a las mujeres y cómo ellas viven en el mundo moderno, cómo hacen frente a diferentes desafíos, qué diferencia tienen las representantes “del sexo débil” en Belarús y en el extranjero y en qué está su fuerza. Tatiana escribe mucho y espera que las mujeres la entiendan y ella les cuente algo útil, con lo que será más fácil y alegre seguir adelante en la vida.
Ella es la voz de buen ánimo. ¡Si el estado de ánimo podría sonar!
A su vez, para los hombres sus obras podrían ser útiles como una especie de la confesión de la femenina “voz interior”, que nunca ellos podrían oír de su esposa, madre y amiga, pero es sumamente importante conocer este sonido para poder actuar adecuadamente con sus seres queridos. La señora Sulímova comparte con todo el mundo sus consejos e ideas. Y lo hace bien abiertamente. Es el secreto de su popularidad como la periodista de radio, así como de la columnista en el periódico.
Iván Podrez. En una palabra, es un caballero
Uno de los últimos proyectos de Iván Podrez –que me llamó la atención en la pantalla de televisión– es el programa dedicado a las estrellas de la música rock. Hace falta señalar que el programa está hecho con mucho gusto y con calidad, que incluso parece que haya sido importado desde algún país. Y sólo la voz de Iván que en el puro idioma belaruso cuenta sobre las celebridades internacionales hace adivinar que es el producto de nuestra TV. Y me siento muy orgulloso por conocer a Iván Podrez como el gran músico y el locutor de radio.
Además de eso, tampoco él podría ser sustituido en la televisión. Es el presentador de los programas más populares, no sólo es una personalidad destacada, que hace brillar aún más la pantalla, sino también es un gran intelectual. La inteligencia y la habilidad son dos rasgos ventajosos que tiene este tipo y que lo destacan entre toda la vulgaridad que está presente en muchos actuales medios de comunicación electrónicos. En una palabra, es un verdadero caballero belaruso.
Cuando escucho que en Belarús no hay periodistas interesantes, me enojo mucho. Pues esto no es cierto. Así lo dice las personas que no leen los periódicos, no ven la televisión y no escuchan la radio. Es la gente que idealiza todo lo extranjero y no le gusta nada nacional. Yo he comprobado en un ejemplo de sólo de diez de mis colegas, que en Belarús, así como en cualquier país hay periodistas y presentadores muy profesionales y muy talentosos. Claro que este número podría ser aún mayor. Y estoy seguro de que ustedes, estimados lectores, podrían dar ejemplos de otros nombres más. Yo también estoy dispuesto a ampliar esta lista. Aunque sería inmodesto, “promover”, por ejemplo, a mis colegas periodistas de la revista, “Belarús”. En estos días de fiesta me permiten sólo darles un consejo: lean más buenas publicaciones y miren más buenos programas de televisión. Pues como se dice desde hace mucho tiempo, el conocimiento es la fuerza. Con la ayuda de los periodistas, ustedes siempre tendrán oportunidad única de conocer Belarús y el mundo.
Todo el mundo celebra estas fiestas, pero los periodistas tienen más trabajo: salen a las calles, hablan con la gente, hace llamadas telefónicas. Los días el 1° y 9 de mayo los periodistas cuentan a todo el mundo cómo sus compatriotas celebran estas fiestas. A su vez, el 5 y 7 de mayo ellos escriben informes y cuentan sobre los éxitos de sus colegas periodistas. Pues según la tradición de muchos años, estos días en el Ministerio de Información y en la Unión de Periodistas de Belarús destacan a los mejores autores con las mayores adjudicaciones profesionales: la estatuilla, “Litera de Oro”, y una insignia de honor, “Pluma de Oro”. Muchos de los colegas –de los que voy a contar en adelante– ya tienen estos símbolos de reconocimiento de sus éxitos en la profesión. Pero esto no es tan importante en sus vidas.
Las personas –que toman la decisión de escribir o entrevistar– comienzan a hacerlo en una edad temprana. Su motivación principal es compartir con los demás lo que ellos ven alrededor. Pues la mayoría de nosotros sólo ve el mundo que nos rodea y nada más. A su vez, mucha información sobre lo que está sucediendo en el país y en el mundo nosotros la recibimos de los periódicos y de la televisión. En realidad, esta gente sólo se destaca por un rasgo bien característico: lo que ve, no lo guarda en el pozo de la memoria, sino pone en un papel o graba en la película para transmitir a miles o millones de sus compatriotas, así como a los que viven en el exterior y que aún no saben sobre algo nuevo, inusual e importante.
Vamos a conocer más de cerca a estos cronistas de nuestro tiempo.
Olga Sákharova. La mejor guía por la ciudad de Minsk
Olga Sákharova en el canal de televisión STV ocupa un cargo alto. Es la directora de programas de arte, y el público la conoce como la presentadora del programa, “Minsk y los vecinos de Minsk”. En mi opinión, su segundo oficio es más importante. De hecho, Olga cumple con una función única: ella es la guía por la ciudad de Minsk. Durante casi diez años de la existencia de su proyecto en la televisión nacional ella recorrió toda la capital belarusa, al pasar por todos los rincones. A mi parecer que al ver sus programas, incluso si uno está viviendo en Nueva Zelanda, fácilmente puede conocer la ciudad tan a fondo que una vez al encontrarse en la capital belarusa, podría convertirse en el mejor experto que cualquier vecino local.
Olga Sákharova nació en Minsk. Aunque esto podría no suceder nunca, cuenta la periodista:
— Es cierto, nací en Minsk. Aunque estaba previsto que yo naciera en la capital de la República de Komi, Rusia: Syktyvkar, donde mi padre sirvió en el ejército. Mi madre un poco antes de mi nacimiento decidió visitar a sus familiares en Minsk y al llegar, de inmediato fue hospitalizada.
Olga Sákharova es una de aquellas personas que cree que todos los esfuerzos del trabajo de periodista no son vanos. Además de eso, ella siempre está dispuesta a conocer la opinión de la gente en cuanto a sus programas. Pues sus historias conmueven a las autoridades locales y los vecinos, obligándoles juntos resolver problemas comunes:
— Desde hace mucho tiempo el programa, “Minsk y los vecinos de Minsk”, es una especie de plataforma interactiva, donde la gente puede expresar sus deseos en cuanto al futuro de la ciudad. En el programa de Olga las autoridades dan respuestas claras a todas las respuestas.
Oleg Lukashévich.Cazando lo bello
Percibir que podría interesar al público y comprender que haría popular su programa es el rasgo característico del periodista de televisión, Oleg Lukashévich. Se hizo famoso gracias a una serie de reportajes dedicados a la búsqueda de las huellas en el extranjero de los grandes oriundos de Belarús: Marc Chagall en Francia, Ignacio Domeyko en Chile, Estanislao Augusto Poniatovski en Polonia y de muchas otras celebridades. Oleg recorrió todo el mundo y por primera vez mostró a los belarusos los lugares, donde pisaban la tierra sus compatriotas de reconocimiento mundial.
Oleg Lukashévich siempre tiene límites altos en su obra. Él quiere hacer y hace el mejor y original producto: ya sea en la televisión o una obra literaria. Después de viajar por Belarús, fue editado su álbum (en coautoría con su colega, Alexander Alexéev), “Patrimonio de Belarús”. En el mismo están recogidas las imágenes de las verdaderas obras maestras de la arquitectura del país. Al mismo tiempo, Oleg se presentó en el mismo como un buen fotógrafo. A esta altura, el álbum adorna las mejores bibliotecas del mundo: desde la de la reina de Gran Bretaña y hasta la del Papá de Roma. Y eso, según el personal de librerías del país, es lo mejor que puede comprar un viajero como un recuerdo sobre Belarús.
A Oleg Lukashévich se lo atrae mucho todo lo bello: historia, cultura, celebridades brillantes, obras maestras de la arquitectura, etc. Y él sabe cómo presentarlo en la pantalla y en las páginas de álbum. Él se alejó más allá del periodismo y está trabajando como una especie de diplomático, difundiendo los conocimientos sobre su país natal en todo el mundo, mostrando solamente su mejor lado.
Olga Makey. Cazando los hechos
Si Olga Sákharova durante muchos años sueña con volar en aviones (incluso quería ser azafata), su colega periodista del canal de televisión, Olga Makey, está volando muy a menudo. Así que ella viaja mucho a fin de poder hacer programas de todos los rincones del mundo sobre las negociaciones intergubernamentales entre Belarús y los países amigos.
Cabe destacar que hace unos años, Olga Makey fue galardonada con un prestigioso premio de la comunidad televisiva de Belarús: la estatuilla, “Televershina”, en la categoría, “Mejor Reportero”. Hizo informe sobre la llegada en el puerto de Odesa del primer buque con el petróleo venezolano para Belarús. Se encontró allí antes que nadie. Sólo al día siguiente vinieron los representantes de otros medios de comunicación.
Al principio Olga contaba historias entretenidas y luego comenzó a cubrir temas serios. A Olga se le encanta trabajar mucho:
— Cuando tomo vacaciones, me siento muy aburrida. Me gusta moverme, tratar de hacer muchas cosas, no me asustan para nada las situaciones de emergencia, cuando tengo que improvisar en vivo. Buscando algo exclusivo, estoy dispuesta a cualquier cosa. ¿Por qué soy tan atrevida? Cuando niña, practicaba el deporte hípico. Me hice candidata para el maestro en la superación de los obstáculos. Lo que a veces puede ser muy traumático. Gané el título de vice campeona del país. Siendo pequeña, todos los días me iba a entrenar la base deportiva que se situaba en afueras de la ciudad de Molodechno, a 35 kilómetros de mi casa en Minsk. Pedía llevarme a la gente desconocida. ¿Se imagina? Mentía a mi madre, diciendo que me iba en ómnibus. Porque el transporte regular iba allí una vez al día, en una hora incómoda para mí...
Sobre Olga, yo diría, parafraseando la conocida expresión, que “estas personas podrían ser incluso astronautas” Y en el periodismo la gente de este tipo es muy apreciada. Pues además de su gran laboriosidad, Olga Makey también se ve muy bien en la cámara. Cómo se dicen los profesionales, la cámara la ama. Sin esto en la televisión es imposible tener éxito, no importa lo que uno tiene otros talentos.
Ales Karliukévich. El pescador en la orilla de la literatura
¿Qué impresiona, cuando uno pasa por la oficina de Ales Karliukévich, el redactor jefe y el director de la editorial, “Zviazdá” (en el idioma belaruso estrella — Aut.), y del diario, “Zviazdá”? Es su escritorio que no se parece a ningún otro en el país. En el mismo permanecen muchos libros, revistas y periódicos. Y todo eso no sólo son productos de la editorial, “Zviazdá”. Ales Karliukévich tiene tiempo para leer todo lo que se publica sobre Belarús en el país y en el extranjero. Y a pesar de la presión del tiempo, el redactor jefe y el director se ve obligado a resolver muncho problemas económicos relacionados con el trabajo creador. Además de eso, él escribe comentarios sobre muchos libros.
Probablemente no haya nadie quien mejor que Ales Karliukévich conoce el mundo de libros dedicados a nuestro país, que escriben todos los días muchos científicos. Una de las mayores pasiones de Ales Karliukévich es conocer su tierra natal, así como penetrar junto con otros autores a las profundidades insondables de nuestra historia. Además de eso, Ales Karliukévich lleva a cabo sus propias investigaciones científicas. Por lo tanto, sus libros son muy esperados por miles de lectores belarusos no sólo adultos, sino también por los niños. El señor Karliukévich –siendo una personalidad multifacética– escribe mucho para los chicos.
Pero lo más importante es que Ales Karliukévich –siendo también el editor– busca verdaderas obras maestras escritas por sus colegas –historiadores y escritores locales– y se los publica en el periódico, “Zviazdá”. Siendo muy buen profesional, él busca el mejor producto de información para ser el primero en llevarlo a miles de lectores.
Tatiana Sivets. La poetisa
Estoy seguro de que a Tatiana se la envidian muchos poetas hombres. Ella es poetisa. Pero sólo algunas personas de las –que se dedican a la poesía– logran llegar a trabajar en la televisión. Es más convertirse en la presentadora de su propio programa. Es su gran suerte. Pero ella no abuse de lo que le ha dado el Dios: el talento propio. No recita sus poemas, sino entrevista a la gente interesante, es decir se dedica al periodismo clásico.
Hacer abrirse a las personas creativas, así como hacerlas ser sinceras y francas es todo un arte. A menudo, las personas con talento están cerradas, viven en su capullo y realmente no quieren abrir su alma al mundo. Se manifiestan sólo en su obra. A su vez, Tatiana Sivets, como nadie, conoce la psicología de la gente de la literatura y el arte. Pues ella también es la editora jefe del periódico, “Literatura y Аrte”, donde aparecen los nombres de los futuros clásicos de la literatura. La edición –que existe desde los años treinta del siglo pasado– se convirtió en una tribuna para muchos reconocidos escritores belarusos. Tatiana sigue trabajando en la selección del grano de la paja: de las mejores muestras de la palabra belarusa hasta ejercicios grafomanos. A su vez, el editor es el nivel más alto en la carrera periodística. Y mucha responsabilidad. Si uno muestra algún escepticismo hacia el verdadero talento, nunca podrá distinguir a un genio. Parece que Tatiana Sivets sabe aprovechar a full la oportunidad de conocer a un verdadero maestro.
Constantino Yumanov. La voz del pueblo
Unos conocen a Constantino Yumanov como uno de los organizadores de las fiestas empresariales, otros lo conocen como el DJ en la radio. Pero para mí él es, en primer lugar, el presentador de un programa popular, “Tiempito de Belarús”. Constantino Yumanov siempre es alegre y chistoso, pero al mismo tiempo, es un periodista muy inteligente. En mi opinión, es una combinación muy rara.
Siendo periodista, él se comunica directamente con la gente. Al programa, “Tiempito de Belarús”, en vivo llaman personas de todo el país y cuentan sobre sus preocupaciones. Y Yumanov les da respuestas que permiten ayudar a solucionar muchos problemas de la vida cotidiana.
Es sumamente importante subrayar que para Constantino su ocupación en la radio y en la televisión no sólo es un trabajo:
— Por primera vez salí al aire en 1998 y no podía ni siquiera imaginar que ligaría toda mi vida con la radio y la televisión. Las altas y bajas de mi crecimiento personal y profesional, así como las búsquedas insaciables de mí mismo me obligaron a pasar de una FM-estación a la otra y de un canal de televisión al otro, adquiriendo nuevos conocimientos y experiencias invaluables. Así me formé como persona creativa, logré establecer lazos de amistad. Así conocí a mi verdadero amor y me casé. Ahora estamos criando juntos a nuestro hijo. En el aire, está mi segundo hogar.
Liudmila Rublévskaya. Trabajando el día y la noche
Los comentarios literarios de Tatiana Rublévskaya son altamente valorados por sus colegas escritores. Sin embargo, lo más importante es que la misma Liudmila no sólo es la crítica literaria, sino también la autora de muchas novelas muy interesantes dedicadas a la historia de nuestro país. Sus obras no están publicadas en las páginas del periódico, sino se editan como libros separados, que se venden muy rápidamente. Tatiana Rublévskaya sigue escribiendo nuevas historias. Una vez la pregunté, cómo le alcanza el tiempo para todo: hacer comentarios literarios y escribir tomos con historias de aventuras. Ella me dijo lo siguiente:
— Lo hago al regresar de mi trabajo principal. Por lo general, en la noche.
¿No les parece una hazaña creativa? Creo que esto es una necesidad natural de un verdadero escritor: expresarse en el papel. Sin embargo, en el caso de la señora Rublévskaya hay un factor muy importante: sus pensamientos son apreciados por los demás y, por lo tanto, no se mantienen durante mucho tiempo en el escritorio, sino se publican y aparecen en las librerías.
No conozco a ningún otro periodista belaruso tan activo como ella. Eso la destaca entre los periodistas y escritores de nuestro país.
Tatiana Sulímova. Toda la fuerza del sexo débil
Durante muchos años sólo oía hablar ella Pero nunca la veía. Ella fue la estrella de una de las estaciones de radio de Minsk. Yo diría más: era la voz de una época entre dos milenios. Siempre era muy interesante oír lo que decía Tatiana Sulímova.
Ahora leo que ella escribe. En el periódico, “Sovétskaya Belarús”, ella se manifestó como muy buena publicista. En primer lugar, sus columnas literarias de autora están dedicadas a las mujeres y cómo ellas viven en el mundo moderno, cómo hacen frente a diferentes desafíos, qué diferencia tienen las representantes “del sexo débil” en Belarús y en el extranjero y en qué está su fuerza. Tatiana escribe mucho y espera que las mujeres la entiendan y ella les cuente algo útil, con lo que será más fácil y alegre seguir adelante en la vida.
Ella es la voz de buen ánimo. ¡Si el estado de ánimo podría sonar!
A su vez, para los hombres sus obras podrían ser útiles como una especie de la confesión de la femenina “voz interior”, que nunca ellos podrían oír de su esposa, madre y amiga, pero es sumamente importante conocer este sonido para poder actuar adecuadamente con sus seres queridos. La señora Sulímova comparte con todo el mundo sus consejos e ideas. Y lo hace bien abiertamente. Es el secreto de su popularidad como la periodista de radio, así como de la columnista en el periódico.
Iván Podrez. En una palabra, es un caballero
Uno de los últimos proyectos de Iván Podrez –que me llamó la atención en la pantalla de televisión– es el programa dedicado a las estrellas de la música rock. Hace falta señalar que el programa está hecho con mucho gusto y con calidad, que incluso parece que haya sido importado desde algún país. Y sólo la voz de Iván que en el puro idioma belaruso cuenta sobre las celebridades internacionales hace adivinar que es el producto de nuestra TV. Y me siento muy orgulloso por conocer a Iván Podrez como el gran músico y el locutor de radio.
Además de eso, tampoco él podría ser sustituido en la televisión. Es el presentador de los programas más populares, no sólo es una personalidad destacada, que hace brillar aún más la pantalla, sino también es un gran intelectual. La inteligencia y la habilidad son dos rasgos ventajosos que tiene este tipo y que lo destacan entre toda la vulgaridad que está presente en muchos actuales medios de comunicación electrónicos. En una palabra, es un verdadero caballero belaruso.
Cuando escucho que en Belarús no hay periodistas interesantes, me enojo mucho. Pues esto no es cierto. Así lo dice las personas que no leen los periódicos, no ven la televisión y no escuchan la radio. Es la gente que idealiza todo lo extranjero y no le gusta nada nacional. Yo he comprobado en un ejemplo de sólo de diez de mis colegas, que en Belarús, así como en cualquier país hay periodistas y presentadores muy profesionales y muy talentosos. Claro que este número podría ser aún mayor. Y estoy seguro de que ustedes, estimados lectores, podrían dar ejemplos de otros nombres más. Yo también estoy dispuesto a ampliar esta lista. Aunque sería inmodesto, “promover”, por ejemplo, a mis colegas periodistas de la revista, “Belarús”. En estos días de fiesta me permiten sólo darles un consejo: lean más buenas publicaciones y miren más buenos programas de televisión. Pues como se dice desde hace mucho tiempo, el conocimiento es la fuerza. Con la ayuda de los periodistas, ustedes siempre tendrán oportunidad única de conocer Belarús y el mundo.
Víktar Kórbut