Terra Nova

[b]A esta altura, la agricultura Belarusa no se puede imaginarla sin bonificaciуn de los suelos. Una tercera parte de los productos de alimenticios los agricultores se los cultivan en los campos creados en el lugar de los antiguos pantanos: son casi tres millones de hectбreas...[/b]
A esta altura, la agricultura Belarusa no se puede imaginarla sin bonificaciуn de los suelos. Una tercera parte de los productos de alimenticios los agricultores se los cultivan en los campos creados en el lugar de los antiguos pantanos: son casi tres millones de hectбreas. Sin estas tierras –en cuya bonificaciуn llevada a cabo en la segunda mitad del siglo pasado han sido invertidos mбs de siete mil millones de dуlares norteamericanos– nuestro paнs no sуlo no podrнa ser un importante proveedor de los productos alimentos en el mercado exterior, sino tampoco podrнa cubrir sus propias necesidades en cuanto a los vнveres
En realidad, los suelos bonificados se consideran nuestra riqueza nacional que ha sido creada por varias. Sin embargo, los sistemas de bonificaciуn, asн como las demбs obras hechas por un hombre, requieren ser cuidados constantemente. De lo contrario, se reduce el monto de las cosechas e incluso en algunos casos los campos vuelven a convertirse en los pantanos. Actualmente, segъn los datos del departamento de bonificaciуn de suelos y de economнas fluviales del ministerio de Agricultura y Productos Alimenticios de Belarъs, esperan ser recuperadas 420 mil hectбreas de suelos bonificados. En otras 34 mil hectбreas hace falta concluir las obras una vez iniciadas y destinadas para llevar a cabo el proceso de drenaje y comenzar a utilizarlas. Hace falta seсalar que las obras de bonificaciуn de los suelos es un importante proyecto nacional.

El tiempo hace correctivos
En torno al 60 por ciento de los suelos bonificados se encuentran en Polesiye. Aquн fueron desecadas unas 700 mil hectбreas de turberas. Lo que cambiу mucho la vida en la regiуn. Antes de la recuperaciуn de los suelos los vecinos de Polesiye abandonaban su pequeсa patria. En los pantanos, en donde era imposible mantener la producciуn agrнcola, no habнa trabajo, ni se podнa llevar a cabo la vida cуmoda. Por ejemplo, en los minicipios, como Gбntsevichi, Luninets y Pinsk los humedales ocupaban hasta el 80 por ciento de todo el territorio. Los campos de pequeсo contorno –en donde no habнa espacio para poner maquinaria– obligaban a olvidar de grandes cosechas. Hoy en dнa, es difнcil de creer, pero ya es un hecho: en 1961 la cosechada bruta de grano en Belarъs ascendiу a poco mбs de dos millones de toneladas con el rendimientos de menos de nueve toneladas por hectбrea. La recuperaciуn de los suelos permitiу a emprender el desarrollo intensivo de la agricultura, ofreciendo empleos y perspectivas a la gente de Polesiye. Ya en los aсos ochenta del siglo pasado en las mejores economнas de las provincias de Brest y Gуmel recibнan por 60 quintales por hectбrea.
Pero el tiempo es cruel con las obras creadas por un hombre. Muchos de los sistemas de drenaje han sido deteriorados y requieren reparaciуn. Su recuperaciуn no es un proyecto barato para nada. Pero el rendimiento cubre los medios invertidos. Pues desde los suelos bonificados –que necesitan ser recuperados– los agricultores no pueden obtener productos e incluso a veces las cosechas se pierden por completo. Es evidente que del estado de los suelos bonificados depende no sуlo el desarrollo econуmico de la zona, sino tambiйn el bienestar y la prosperidad de los vecinos.
En 2010, cuando fue aprobado el programa nacional, “Preservaciуn y uso de los suelos bonificados para el perнodo de 2011 a 2015”, el costo de todas las obras ascendiу a unos cinco billones de rublos belarusos. Sin embargo, en el aсo 2011 fueron hechos los correctivos. La devaluaciуn del rublo belaruso –que llevу al crecimiento del precio de los recursos materiales– hizo corregir el programa. Actualmente, estamos hablando sobre el incremento de dos veces de su costo inicial. Pues para cumplir con las tareas de este aсo, segъn el director del departamento de bonificaciуn de suelos y de econimнas fluviales, Anatoly Bulynia, se necesitan un billуn de rublos belarusos.
Este aсo, los especialistas en los trabajos de bonificaciуn tienen que recuperar en torno a 80 mil campos y prados desecados. Otra tarea comprende la rotura de los nuevos terrenos. El primer destino es el municipio de Stolin. El mayor problema de los vecinos de Olshany es la falta de los suelos aptos para una producciуn agrнcola. Los agricultores locales, asн como la cooperativa de producciуn “Nueva Pripiat”, estбn dispuestos a cultivar hortalizas y frutas de alta calidad. Pues el clima cбlido y los suelos fйrtiles permiten hacerlo. Sуlo faltan campos. Mientras tanto, en torno a 15 mil hectбreas de humedales –en donde ahora estб creciendo el matorral– pueden ser utilizadas para organizar la producciуn agrнcola. Su drenaje fue llevado a cabo antes, pero no fue realizado el cultivo. Ya este aсo los especialistas en los trabajos de bonificaciуn tienen intenciуn de convertir estas бreas en los campos fйrtiles. Ademбd de eso, un trabajo similar estб programado llevar a cabo en la provincia de Vнtebsk, en las obras que han sido construidas aun en los tiempos soviйticos, pero nunca concluidas. Pero hay que pensar bien antes de bonificar suelos y hacerlo sуlo en aquellos lugares, en donde los mismos son altamente productivos y pueden ser aprovechados con mбxima eficiencia. Pues la bonificaciуn es de dos veces mбs cara que la recuperaciуn de los campos ya existentes. A esta altura una hectбrea del nuevo desecado sale 25 millones de rublos, mientras que una hectбrea recuperada 12 millones de rublos belarusos.
En opiniуn del director del instituto de recuperaciуn de suelos de la Academia Nacional de Ciencias de Belarъs, Nikolay Vakhonin, la construcciуn de los nuevos sistemas de drenaje es un tema muy actual. “En los prуximos cinco aсos estб programado recuperar por completo los sistemas de bonificaciуn y ponerlos en el rйgimen de explotaciуn, lo que serб mucho mбs barato que llevar a cabo su reparaciуn general”, subraya el cientнfico.
A propуsito, los diseсos de los expertos del instituto permiten ahorrar del cinco al siete por ciento de los fondos asignados con el fin de cumplir con este programa. Aъn queda mucho por hacer para asegurar el acompaсamiento cientнfico de las obras en Pripiat de Polesiye y en el parque nacional “Belovйzhskaya Puscha”. Nikolay Vakhonin asн comenta la principal tarea de los cientнficos:
- Los especialistas en los trabajos de bonificaciуn disponen de las mismas obras hidroelйctricas, pero sus tareas son muy diferentes. El complejo agroindustrial de Belarъs comienza a funcionar segъn tйrminos de mercado. Estamos aprendiendo a ganar el dinero. A diferencia de los tiempos soviйticos, cuando el objetivo de la bonificaciуn de los suelos fue lograr el mбximo crecimiento del cultivo, a esta altura nos centramos en la meta de pasar de los volъmenes de la producciуn a eficiencia y resultado final.

Un compromiso sensato
En una palabra, los suelos bonificados –que no necesitan de un cuidado constante e inversiones financieras– deben llevar a una rendiciуn merecida. Por lo tanto, siempre hace falta tomar en consideraciуn la economнa. Como se sabe, en Polesiye el desecado fue llevado a cabo con ayuda de una red de canales abiertos. Pero este mйtodo ya es anticuado. En estos suelos es complicado utilizar la maquinaria de uso amplio. Los campos de pequeсo contorno requieren constantes virajes de los vehнculos poderosos, por lo tanto es difнcil garantizar una siembra completa. En resultado, los gastos son altos y el rendimiento es bajo. El drenaje y los canales cerrados es un mйtodo mбs progresivo. Ademбs de eso, es mбs preferibles, pues en Polesiye durante la recuperaciуn inicial tras el uso de una red abierta las turberas se han hecho mбs finas. A su vez, los canales se han puesto poco profundos. Y si vamos a profundizarlos, puede bajar el nivel de las aguas subterrбneas. El drenaje, aunque es un mйtodo mбs caro, permite desecar suelos con los canales poco profundos. Por lo tanto, al final serбn beneficiadas la economнa, asн como la ecologнa.
El ъnico problema es el equipamiento tйcnico necesario para llevar a cabo las obras de bonificaciуn. Se necesitan los equipos de drenaje. Cabe seсalar que este tipo de maquinaria no se produce en los paнses vecinos. A su vez, en el mercado internacional el costo del equipo de drenaje es muy alto.
Por lo tanto, los especialistas en los trabajos de bonificaciуn belarusos tiene intenciуn de crear su propia maquinaria. En Logoysk ya ha sido organizado el ensambe de las partes –producidas en una empresa china– de empujatierras. Ademбs de eso, en la fбbrica de excavadoras Kokhanovski, municipio de Tolochin, ha sido lanzada la producciуn de equipos de drenaje. Tambiйn ha sido tomada la decisiуn de producir equipos junto con la empresa inglesa, Mastenbroek, una vez celebrado el contrato de producciуn conjunta de los equipos de drenaje en la fбbrica de excavadoras. Estб programado que hasta el 60 por ciento de las piezas de repuesto serбn fabricadas en Belarъs, lo que de modo importante reducirб el costo del nuevo equipo. Segъn Anatoly Bulynia, en un futuro prуximo la empresa comenzarб a suministrar esta maquinaria al mercado interno, asн como a Rusia y Ucrania.

Desde el desecado hasta el riego
Belarъs es un paнs que no dispone de una red estable de abastecimiento de agua. Por lo general, en primavera y otoсo en nuestro territorio hay un exceso de agua, a su vez, en verano no tenemos suficientes reservas de agua. Por lo tanto, Belarъs se la llaman paнs de la agricultura inestable. Es imposible hacer pronуstico en cuanto a la futura cosecha. Pero los productos alimenticios es una parte mбs importante de las exportaciones belarusas. En 2015, el monto de las ventas de vнveres en el mercado internacional debe ascender a mбs de siete mil millones de dуlares norteamericanos. Por lo tanto, la tarea mбs importantes de los especialistas en los trabajos de bonificaciуn es la creaciуn de los sistemas de recuperaciуn de los terrenos en el sur de nuestro paнs.

Lнliya Ogorуdnikova
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