Rueda de tiempo de Valeriana Zholtok

[b]La obra creadora de la pintora Valeriana Zholtok dejу importantes huellas en la paleta colorida de toda una йpoca de arte[/b]Una persona talentosa se queda viva para mucho tiempo gracias a sus obras. Las mismas parecen a los sellos expesivos y se guardan en la memoria de la gente durante mucho tiempo. Valeriana Zholtok con su geografнa artнstica dejу extraordinarias huellas entre gran diversidad del arte plбstico nacional.En realidad, Valeriana Zholtok fue una de las mejores pintoras nacionales. Incluso a esta altura sus obras atraen con su fuerza inexplicable, despertando en el alma de los admiradores las emociones genuinas del parentesco сon la misma talentosa pintora.
La obra creadora de la pintora Valeriana Zholtok dejу importantes huellas en la paleta colorida de toda una йpoca de arte

Una persona talentosa se queda viva para mucho tiempo gracias a sus obras. Las mismas parecen a los sellos expesivos y se guardan en la memoria de la gente durante mucho tiempo. Valeriana Zholtok con su geografнa artнstica dejу extraordinarias huellas entre gran diversidad del arte plбstico nacional.
En realidad, Valeriana Zholtok fue una de las mejores pintoras nacionales. Incluso a esta altura sus obras atraen con su fuerza inexplicable, despertando en el alma de los admiradores las emociones genuinas del parentesco сon la misma talentosa pintora.
La reciente exposiciуn en el Museo Nacional de Bellas Artes fue dedicada al 90є Aniversario del natalicio de la pintora. Sн, Valeriana Zholtok es un ejemplo de como un verdadero arte sobrepasa los lнmites del tiempo, asн como impresiona mucho a pesar de decenas de los aсos transcurridos despuйs del perнodo, cuando las mismas obras fueron creadas. El gran secreto de sus йxitos artнsticos, de su enorme popularidad durante largo tiempo, del reconocimiento de los numerosos amantes y apreciadores del arte se explican con gran encanto de sus cuadros, con la contнnua atracciуn de sus paisajes y naturalezas muertas pintados con extraordinario gusto artнstico. Sн, precisamente en estos gйneros fueron revelados todos rasgos bien valiosos del talento de la pintora: percepciуn lнrica de la naturaleza y de la vida humana, optimismo inagotable, bondad y la visiуn aguda femenina del mundo, en el cual “renacen” y comienzan a “contar” de sн mismos los objetos inanimados. El atractivo especial de sus obras consiste en su pintura fina que contiene los colores transparentes que necesitan de la atenciуn y agudez de los tonos y semitonos que se expresan de manera muy fuerte, sorprendente y armoniosa.
Valeriana Zholtok naciу en la ciudad de Zhlobin, provincia de Gуmel, en la familia del empleado ferroviario. A finales de los aсos treinta del siglo pasado estudiу en el colegio de arte de la ciudad de Vнtebsk. Trabajaba de la decoradora artнstica en el Teatro Nacional de Уpera y Ballet. Ademбs, a la maestra le fue otorgado el tнtulo de la artista emйrita de artes de la Repъblica de Belarъs. Pero estos datos de su biografнa dicen poco sobre sus verdaderos logros artнsticos. Tal vez, el mбs demostrativo pueda ser el hecho de que cuarenta obras suyas permanecen en el Museo Nacional de Bellas Artes, en los fondos de la Uniуn Belarusa de Pintores y en el Museo del Arte Contemporбneo en Minsk. Serнa bien complicado lograr йxitos tan importantes, cual que fuera talentosa. “La madre trabajaba siempre con mucha alegrнa y gran entusiasmo, cuenta Elvira Pozniak, hija de la pintora. Todo le salнa muy fбcil y natural: ser buena persona, esposa, madre y profesional. Sabнa hacer muchas cosas, era pintora muy talentosa, pero eso no quiere decir que nunca sintiу dudas, penas y descepciones. Pero mi madre nunca temнa las dificultades, аl contrario siempre buscaba soluciones y trataba de encontrar posibilidades para cumplir con sus planes y nunca parar. Este modo de crear fue muy caracterнstico para mi madre, pues fue una persona que estaba en la bъsqueda constante. Nunca tuvo fracasos relacionados con la impotencia profesional, es mбs bien a veces sentнa insatisfacciуn por el alto grado de sus propias exigencias hacia su obra creadora”.
A partir del aсo 1946 Valeriana Zholtok comienza a participar en diferentes exposiciones de arte. En los aсos de postguerra y a principios de los aсos cincuenta del siglo pasado pintaba paisajes, cuadros de gйnero y a veces la naturaleza muerta. La mayorнa de sus obras estб dedicada a Belarъs querida y a sus mejores representantes: a los niсos: “El primero de septiembre” (1951), “Vino el invierno” (1954), “En la hoguera” (1956), “Amigas” (1963) y otras. Varios cuadros suyos cuentan sobre Belarъs en los aсos de la Gran Guerra Patria: “Buscando ayuda de los guerrilleros” (1957), “Enemigo pasу” (1964), “Regreso” (1967) y otros. Ademбs de eso, la naturaleza belarusa siempre fue protagonista de sus paisajes lнricos: “Crecida” (1958) y “Caminos” (1964). Vale destacar que muchos de estos trabajos estбn pintados, siguiendo la estilнstica y los canones del arte realista, y son muy cercanos por su estructura artнstica a las obras de los pintores moscovitas. Valeriana Zholtok se ocupaba de la pintura de gйnero y de la temбtica infantil. En aquel entonces muchos pintores mostraban gran interйs hacia la vida de postguerra y hacia la posibilidad de disfrutar de la vida despreocupada y tranquila en la Tierra. Muy a menudo los pintores intentaban transmitir sus sentimientos alegres por medio de las imбgenes de niсos. Ademбs de eso, en la pintura belarusa de los aсos cincuenta del siglo pasado junto a la temбtica de postguerra dominaba la temбtica de la vida cotidiana que se convirtiу en un gйnero muy importante que permitнa comprobar la madurez artнstica de los pintores, observar, generalizar toda la diversidad de la vida alrededor. Sуlo los trabajos de gйnero permitнan apreciar de modo positivo o negativo los fenуminos naturales. Lo que, sin duda, obligaba a los pintores tener ciertas cualidades йticas, las experiencias de vida y el alto nivel de la maestrнa artнstica.
No es sorprendente que las mejores composiciones de gйnero de Valeriana Zholtok hayan representado los rasgos caracterнsticos de la pintura de gйnero de los aсos cincuenta del siglo pasado. La misma se destaca por la idea bien pensada del cuadro, en donde cada personaje cumple con su determinado papel en los marcos de su importancia, cuando los espectadores no deben razonar mucho: el mismo pintor todo habнa explicado. Las imбgenes de los protagonistas fueron descifradas por el mismo autor del cuadro y a los espectadores se les quedaba sуlo constatar: parecнan a la vida real... La pintura natural seguнa precisamente esta fуrmula. El cuadro fue pintado con uso de los medios artнsticos que se percibнan por los espectadores. De este modo fueron hechas todas las mejores composiciones de gйnero de Valeriana Zholtok que en cierto tiempo gozaban de muchнsima popularidad de los admiradores.
La obra de Valeriana Zholtok se destaca por el gran nъmero de paisajes. A primera vista se puede parecerse que es su gйnero principal. Pero no es asн. Los numerosos esbozos del paisaje –hechos en diferentes aсos– salen del diario del viajero, en donde estбn reunidas todas las impresiones, incluso ciertas observaciones desde el exterior, sin intentar explicarlas y generalizarlas. Estas observaciones se ponen mбs notorias, mientras la pintora estб viviendo en el exterior. Realizando los viajes, Valeriana Zholtok de modo cuidadoso y amigable estaba contemplando extraordinarias bellezas de los sitios desconocidos. “Querнa no sуlo ver, sino tambiйn grabar en mi memoria todas estas bellezas”, se quedу escrito en su diario personal.
Pero sуlo en su querida Belarъs Valeriana Zholtok logrу convertirse en la verdadera maestra de paisaje, profunada y bien original. La pintora sabнa muy bien, de que en su patria comenzaba la primavera y como llegaba inesperadamente el otoсo, en que consistнa el encanto del invierno belaruso y cual era el secreto del fresco verano belaruso.
Mucho tiempo la maestra dedicу a la naturaleza muerta que era elemento de la inspiraciуn artнstica de Valeriana Zholtok. Precisamente la misma le permitiу demostrar a full todas sus capacidades artнsticas. A propуsito en sus naturalezas muertas se notaba mucho la evoluciуn de la obra creadora de la pintora a partir de los aсos cincuenta hasta los aсos ochenta del siglo pasado.
Por su naturaleza humana Valeriana Zholtok fue una persona muy fina, propensa a las observaciones y a las reflexiones muy profundas de lo visto. Precisamente la naturaleza muerta ofrecнa esta maravillosa posibilidad de ver cosas y disfrutarlas. Ademбs de eso, precisamente la naturaleza muerta exigнa de la Valeriana Zholtok mucha pasiуn y entusiasmo. Sуlo en este caso la naturaleza muerta estaba dispuesta a demostrar todos sus secretos. “Al llegar a entenderlo, la pintora obtuvo el sentimiento alegre del descubrimiento y de una verdadera satisfacciуn de lo logrado y de lo hecho. Pero la mayor alegrнa se le traнa la comprensiуn de que todo –que estaba representado en el lienzo– estaba aceptado muy bien por el pъblico”, estamos leyendo en el famoso diario de Valeriana Zholtok.
A finales de los aсos cincuenta del siglo pasado a travйs de de sus primeras y tal vez mбs exitosas obras de aquellos aсos –“Primavera” (1957) y “Campanillas de bosque” (1958)– la maestra se diу cuenta de que la naturaleza muerta era su gйnero mбs preferido. Fueron pintadas las obras muy coloridas que tuvieron alto nivel artнstico y se hicieron mejores no sуlo en la colecciуn de la misma pintora reconocida, sino tambiйn en toda la pintura belarusa. Para Valerinan Zholtok fue el tiempo de grandes descubrimientos y del profundo encanto por la naturaleza natal.
En las naturalezas muertas de Valeriana Zholtok las flores son elementos muy festivos y solemnes, ocupan lugar cйntrico de todo el espacio del cuadro. En sus trabajos se nota la aspiraciуn hacia la selecciуn muy atenta de la formas de aquellas plantas que forman parte de la composiciуn artнstica. Pero contemplando la paleta de los colores, Valeriana Zholtok, intentaba crear la belleza de modo, como si corregiera la naturaleza y logrу demostrar en sus naturalezas muertas la sensaciуn de la armonнa y especial emocionalidad de los colores. Lo comprueban las naturalezas muertas de los aсos setenta del siglo pasado: “Serbal rojo”, “Fronda otoсal” y “Bodeguнn azul”. Son obras se caracterizaban por cierta tendencia comъn. Se obtenнan el especial carбcter nacional. Todo esto se puede observar en nuestra tierra natal y todo eso es muy bello e impresiona muchнsimo, lo subraye en sus obras la misma pintora. Las naturalezas muertas de Valeriana Zholtok сon bayas, objetos del uso cotidiano, flores estбn llenas de los colores vivos y muy intensos. El rasgo caracterнstico de sus trabajos es la sensaciуn de la actualidad. Aun en los aсos cincuenta del siglo pasado Valeriana Zholtok descubriу la temбtica de entografнa de folklore en la naturaleza muerta belarusa. Por medio de los “rushnikн” (toallas nacionales de color rojo y blanco — Aut.) bordados, de la plбstica de las siluetas de la cerбmica popular, la pintora logrу demostrar de modo muy interesante el contenido nacional de sus cuadros.
En 1958 el pъblico tuvo posibilidad de apreciar su cuadro “Campanillas de bosque” que se convirtiу en la obra de signo del arte belaruso de la segunda mitad del siglo ХХ. La idea de la misma fue muy sencilla: ventana abierta de una casa campestre de madera, el jarrуn con enorme ramo de las flores de bosque permanecido en el “rushnik”. Incluso a esta altura esta obra estб llena de gran colorido, de la percepciуn muy limpia y natural y refleja el modo de sentir las cosas muy positivo y optimista. Es un cuento poйtico sobre la naturaleza. Es un cuento nostбlgico, natal y tan cercano.
Naturalmente, todo el bagaje creativo de Valeriana Zholtok es rico y bien contenido. Fue bien evidente la aspiraciуn de la pintora a encontrar su incomparable estilo nacional de pintura. Precisamente por este gran aporte a la pintura belarusa se la recordarбn los coetбneos. La obra creadora de la Valeriana Zholtok serб de interйs para las generaciones futuras. Pues el verdadero arte no se pierde con el tiempo, simplemente sigue viviendo en el tiempo: hoy y maсana.

Vнktor Mikhбilov
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