Las estadísticas crean un buen estado de ánimo

El hecho de que el año pasado se hizo récord en Belarús según el número de recién nacidos
Las estadísticas de los últimos años no dejan ninguna duda: el número de población en el país comienza a crecer de forma visible. Los escépticos dicen que esto sólo ocurre debido a los procesos de migración. Es cierto, es por este hecho también: sólo el año pasado a Belarús llegaron 28 mil 400 personas, mientras que se fueron del país 9 mil 900 personas. Es decir, el número de migrantes ascendió a casi 18 mil 500 personas. 


Pero hace falta señalar que ésta no es la única razón. La dinámica positiva de la tasa de natalidad se mantiene durante los últimos años. Lo que es todo un logro de la política demográfica del Estado. La vicepresidenta del Comité Nacional de Estadísticas de Belarús, Zhanna Vasilévskaya, no oculta el optimismo. La tasa de natalidad se mantiene sin cambios durante tres años seguidos y es de 12.5 por cada mil habitantes. Al mismo tiempo, la tasa de natalidad más alta en el año 2015 fue en las provincias de Brest y Minsk: 13.5. 

— El año pasado marcó el número máximo de nacimientos en los últimos cinco años: más de 119 mil niños, informó la vicepresidenta. Es casi 500 niños más que en 2014, y 11 mil más que en 2010. Según el número de recién nacidos, la posición de liderazgo se la ocupa la ciudad de Minsk, donde el año pasado nacieron casi 23 mil niños, es decir, uno de cada cinco pequeños del número total de bebés nacidos en nuestro país. Un poco más de 19 mil pequeños nacieron en la provincia de Minsk. También a este número se acercan dos provincias belarusas más: de Brest y de Gómel. 

Como el resultado el crecimiento natural de la población, según balances del último año, fue registrado en 83 ciudades y 24 asentamientos de tipo urbano. Hace cinco años, estas cifras fueron de 51 y 17, respectivamente. No han sido confirmadas las predicciones de los escépticos con respecto a la desaparición de la población en el campo: el aumento natural del número de habitantes en las zonas rurales del país está marcado en los municipios de Minsk, Brest y de Mozyr. En general, durante el año pasado, el número de habitantes en el país aumentó en 17 mil 500 personas. Y para el principio del año en curso fue de nueve millones 498 mil personas. La región más numerosa sigue siendo la capital de Belarús: en Minsk residen en torno a un millón 960 mil personas: cada quinto habitante del país. A su vez, en las provincias, el número mayor de población es en la provincia de Gómel: un millón 423 mil personas, o casi cada séptimo ciudadano de Belarús. 

Otro punto importante: con más responsabilidad los belarusos comenzaron a contraer el matrimonio, tanto hombres como mujeres. Zhanna Vasilévskaya ve una tendencia significativa: 

— En los últimos años, crece el número de niños recién nacidos en los matrimonios registrados. Así, si en 2010 en los matrimonios registrados nació el 80 por ciento de los niños y en el año 2015, el 86 por ciento de los bebés. Las visiones modernas de las personas jóvenes en cuanto a la obtención de la educación, la adquisición de la profesión y al matrimonio y las relaciones familiares han dado lugar a cambios en la misma edad de la fecundidad: en los últimos cinco años el número de nacimientos por cada mil mujeres a la edad de 15 a 19 años redujo en un 12.6 por ciento, mientras que el número de estos nacimientos por cada mil mujeres de entre 25 y 29 años se incrementó en un 13.6 por ciento, a la edad de 30 a 34 años en un tercio y a la edad de 35 a 39 años a la mitad. 

En resultado también la recompensa por el nacimiento se cambió. Por ejemplo, el año pasado, un mil 316 mujeres dieron a luz a los gemelos y 21 mujeres dieron a luz a los tres bebés (hace cinco años, la cifra fue de 1.027 y 18). Pero lo más importante es que más de la mitad de los nacimientos hoy en día se debe al nacimiento del segundo, tercer hijo y más. A propósito, según el nacimiento del tercer hijo y más en el último año, la posición de liderazgo se la ocupó la provincia de Brest. A su vez, según el número de madres –que han dado a luz a su segundo hijo– la posición de liderazgo se la tuvo la ciudad de Minsk. 

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