El modelo de desarrollo social y económico de Belarús ya cumplió más de veinte años

Esto fue confirmado en un estudio reciente realizado por expertos del Fondo Monetario Internacional. Ellos llegaron a la conclusión de que cuanto más sea la desigualdad social, más lento e inestable es el crecimiento económico. Y las autoridades deberían tener centrarse más en el nivel de vida de los estratos medios y bajos de la sociedad. Lo que se ha hecho y se está haciendo en nuestro país desde hace más de veinte años. La protección social de la población es una confirmación práctica del hecho de que las personas son el principal recurso del desarrollo.
Sin duda, la economía es una herramienta más importante de cualquier sociedad. Pero nosotros no somos robots, y por lo tanto, la economía, en primer lugar, son las relaciones entre personas. Es decir, los expertos del Fondo Monetario Internacional admiten que la idea de la expansión de las instituciones financieras de los Estados Unidos, y más tarde de la Unión Europea, en los países menos desarrollados llevó al hecho de que el número de personas pobres en el mundo comenzó a crecer cuatro veces más rápido que el de más ricos: 61 millones de personas ganan el mismo que tres mil 500 millones de personas con los ingresos más bajos. Es decir, por cada dólar –recibido por las personas más ricas del mundo– los más pobres obtienen 1.7 centavos. En resultado, los altos niveles de desigualdad tienen un impacto negativo en la productividad de trabajo. Los hijos de los pobres reciben la educación del nivel más bajo y no pueden tras los problemas financieros ingresar en las universidades. Si añadimos la falta de los productos alimenticios y las perspectivas para la gente joven, se está formándose rápidamente un importante grupo de personas descontentos. Es esta desigualdad de ingresos se está convirtiendo en una de las principales causas de las guerras y los conflictos. Los tres pilares del modelo del desarrollo social y económico de Belarús es garantizar la seguridad social, la igualdad de ingresos y el orden social justo. Esto requiere de un Estado fuerte y un fuerte líder activo, que da impulsos a la economía. Pues para educar al consumidor de nuevo tipo, son suficientes seis meses, pero la producción se está creando durante años y requiere de la estabilidad y el orden. Cuando el Estado es débil una transición gradual y suave de una economía dirigida a un mercado liberal es imposible. Por lo tanto, nuestro Estado, en el buen sentido de esta palabra, se mete en todo. Y no debería ser de otro modo en el período de transición. Las empresas con pérdidas, la falta de competencia, el nivel bajo de la productividad del trabajo: todo es superable. Lo más importante que la práctica del modelo de desarrollo social y económico de Belarús haya adelantado a la teoría.
Borís Panshin