La juventud eterna del ballet

Siegfried romбntico y Aurora encantadora, apasionadas Esmeraldas y Julietas tнmidas, hadas misteriosas, nбyades, drнades, Willis y narcisos siguen sorprendiendo y ganбndose la admiraciуn de los numerosos aficionados al ballet con su belleza cautivadora, gracia y fascinaciуn
Siegfried romбntico y Aurora encantadora, apasionadas Esmeraldas y Julietas tнmidas, hadas misteriosas, nбyades, drнades, Willis y narcisos siguen sorprendiendo y ganбndose
la admiraciуn de los numerosos aficionados al ballet con su belleza cautivadora, gracia y fascinaciуn.

Los artistas talentosos del Teatro Nacional Acadйmico de Ballet Belaruso de dнa en dнa se esfuerzan por crear el mundo misterioso tan sorprendente y ganarse el reconocimiento del pъblico. Hace poco los solistas jуvenes por primera vez han interpretado los papeles principales en el espectбculo “Pajita” con el acompaсamiento musical de Ludwig Minkus. Se trata de los artistas de ballet, mъltiples participantes y diplomados varias veces en los concursos internacionales, Ekaterina Oleynik y Egor Azarkevich.
“Seguro que no hay chicas que no hayan soсado con convertirse en la princesa de un cuento, — dice Ekaterina Oleynik. — Pero mi apariciуn en la escena se debe tambiйn al sueсo no realizado de mi mamб, aficionada al arte del baile. Fue ella quien me llevу de la mano al colegio coreogrбfico. Con el tiempo los pedagogos del colegio comenzaron a prestarme una atenciуn especial, en mi repertorio aparecieron las variaciones complicadas, adagios, paso a dos. A partir del cuarto aсo de estudios, bailaba en la escena del Teatro Nacional de Ballet los papeles muy diversos. Los primeros papeles principales me propusieron en “Pajita” y “El Cascanueces”. Una experiencia enorme recibн gracias a mi participaciуn en varios concursos de ballet. Sobre todo me acuerdo del Concurso Internacional entre los artistas de ballet Rudolf Nuriev en Budapest, donde la legendaria Maya Plisiйtskaya me entregу su premio personal, revelбndome algunos secretos de la interpretaciуn del papel de Odilia. Pasado un aсo Egor y yo despuйs de graduarnos del colegiу comenzamos a trabajar en la compaснa. Al principio los colegas mбs experimentados me miraban celosos (es que son pocas las jуvenes que despuйs de graduarse se hacen solistas). Luego su amabilidad y el respaldo permanente me motivaron aъn mбs para trabajar”.
“La segunda temporada en la escena del teatro trajo los papeles nuevos y la experiencia profesional, — cuenta Egor Azarkevich. — Ademбs de bailar en “Corsario” y “Carmina Burana” recibн otros papeles: Feb en “Esmeralda”, Tibaldo en “Romeo y Julieta” y el papel del solista principal en “Pajita”. El aсo fue interesante y difнcil a la vez. En una gira artнstica visitamos con la compaснa Siria y Egipto. Pero, a decir verdad, allн mбs tiempo pasй dedicбndome a curar y prevenir los traumas que tampoco se puede evitar a veces en nuestro trabajo. Cuando a la edad de cuatro aсos empecй a visitar el cнrculo de bailes y aprender la coreografнa, pues soсaba mбs con ser un futbolista y no podнa imaginarme que de modelos para mн serбn los bailarines tan destacados como, por ejemplo, Mikhaнl Baryshnikov o Aleksandr Godunov. Hoy me gustarнa mбs gozar de la misma fama en la escena belarusa”.
Ahora Ekaterina Oleynik y Egor Azarkevich son los artistas por la maestrнa de los cuales apuesta en el perнodo mбs prуximo el director artнstico del teatro Valentнn Elizariev. Tienen su propia manera de bailar, son enйrgicos, estбn enamorados de ballet y creen en que sus sueсos dorados y sus planes atrevidos cumplirбn algъn dнa. Los apoya su edad joven y su deseo de crear. Sienten tambiйn el respaldo del pъblico belaruso tan amable, que sуlo por poder ver la interpretaciуn de sus artistas preferidos estб dispuesto a perdonarles el temblor de la preocupaciуn, fouettйs fallados, assemblй no terminado compuesto de dos etapas... El espectador estб seguro que las emociones y el miedo del estreno pronto se les pasarб y la discreciуn de los estudiantes serб sustituida por la ligereza, la tйcnica maravillosa y el йxtasis de la posibilidad de demostrar no sуlo el academismo exterior, sino la belleza interior que crea el mundo mбgico del ballet clбsico.

Igor Kuzmнn
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