El deseo de “leer” rushnik

[b]Anna Shevtsova de 83 aсos de edad saca del anticuado armario las verdaderas obras de arte. Son rushnikн (toallas tradicionales belarusas de color rojo y blanco con bordado) de unos cuatro metros de largo, algunos de los cuales ya tienen muchos aсos. [/b]Algunos de ellos la madre de Anna Alexбndrovna tejiу en un telar de madera y no se imaginaba que los quisieran ver y adquirir cientos de personas, ofreciendo mucho dinero y que al principio del siglo XXI estas obras de arte tuvieran un gran valor cultural. Hace falta seсalar que rushnikн estбn puestos en una de las salas de las Naciones Unidas, en el museo norteamericano, “Metropoliten”, asн como permanecen en Nueva York, Montreal, Tokio, Parнs, Bruselas... En el pueblo Negliubka, municipio Vetka, provincia de Gуmel, casi todos los hogares son filiales del museo de tejedurнa, en donde estбn presentadas las exposiciones ъnicas.
Anna Shevtsova de 83 aсos de edad saca del anticuado armario las verdaderas obras de arte. Son rushnikн (toallas tradicionales belarusas de color rojo y blanco con bordado) de unos cuatro metros de largo, algunos de los cuales ya tienen muchos aсos.

Algunos de ellos la madre de Anna Alexбndrovna tejiу en un telar de madera y no se imaginaba que los quisieran ver y adquirir cientos de personas, ofreciendo mucho dinero y que al principio del siglo XXI estas obras de arte tuvieran un gran valor cultural. Hace falta seсalar que rushnikн estбn puestos en una de las salas de las Naciones Unidas, en el museo norteamericano, “Metropoliten”, asн como permanecen en Nueva York, Montreal, Tokio, Parнs, Bruselas... En el pueblo Negliubka, municipio Vetka, provincia de Gуmel, casi todos los hogares son filiales del museo de tejedurнa, en donde estбn presentadas las exposiciones ъnicas.

Leemos el ornamento
A finales del siglo XIX en el pueblo Negliubka vivieron tres mil 500 personas. Hoy en dнa, casi 800. A pesar de eso, este agropueblo tuvo suerte a diferencia de los demбs 59 pueblos del municipio que desaparecieron del mapa geogrбfico, una vez sucedida la catбstrofe en la central nuclear de Chernуbyl ...
En los tiempos pasados, el pueblo Negliubka fue conocido por sus maestros, que hacнan acordeones. El ъltimo artesano falleciу hace poco. Pero por allн todavнa viven algunas tejedoras, que conocen todos los secretos del antiguo arte y guardan en sus desvanes los los telares de madera. Sus dedos ya no funcionan como antes, sus ojos no ven como en la juventus, su memoria a veces falla y la presiуn sube y baja todo el tiempo...
Cabe destacar que hoy en dнa sin las toallas locales no se puede imaginar ninguna boda. Es una cosa ritual. En los tiempos remotos, en “rushnik” ponнan a un bebй reciйn nacido. Tambiйn los mismos utilizaban para bajar un ataъd con un niсo a la tumba por una mujer y hombre soltero. Es todo un talismбn, que todavнa adorna los iconos y retratos de los familiares en los hogares locales.
— Una peculiaridad caracterнstica: en Negliubka en el “rincуn rojo” –la parte mбs festiva y colorida del hogar– los vecinos ponen tres toallas bordadas, seсala Larisa Romбnova, investigadora principal del museo de los viejos creyentes y nombres tradicionales belarusos de Vetka, donde permanece la mayor colecciуn regional.
Cada toalla de Negliuska es toda una improvisaciуn. No hay ornamentos iguales. “Aquн, por ejemplo, se puede ver bellota”, la abuela Anna me muestra diferentes ornamentos y no puede explicar que significan ellos. A su vez, para los etnуgrafos locales son sнmbolos sagrados.
— Actualmente, la colecciуn de Negliubka es mбs rica en nuestro paнs. En general, en sus rushniki estбn presentados mбs de 120 ornamentos. Uno de los mбs populares se llama “kruchcha”. ЎEl mismo tiene unos cinco mil! їLe gustarнa poder “leer” un rushnik? Le podrнa a ayudar nuestro libro, “Ornamentos de Pridneprуviye”. Hace falta seсalar que con la ayuda de rushnik la gente mostraba su comprensiуn de la vida y del tiempo. Fнjense: los rushnikн –hechos en el perнodo de los aсos 20 a 30 del siglo pasado– son diferentes de lo que han sido tejidos a finales del siglo XX, sigue comentando Larisa Romбnova.
— Ademбs de eso, tengo un montуn de diferentes camisas. Si quiere, puedo mostrarle, la abuela Anna saca del armario las camisas bordadas muy bellas. Como me contaron los anciandos del pueblo, en un momento aquн viviу el director del koljуs que prohibнa a los hombres a poner estas camisas. Pues no eran apreciadas las tradiciones nacionales, que se consideraban vulgaridad y vestigio del pasado. Por lo tanto, disminuнa el interйs hacia el bordado y tejedurнa...

Йpoca de renacimiento
A esta altura, en el pueblo Negliubka tratan de recuperar las tradiciones tнpicas belarusas. En el centro de tejedurнa (actualmente, asн se llama la casa de la cultura) conocн a Kostia Kulikov de 8 aсos de edad que trabajaba en un telar de madera. En el pueblo hay el cнrculo “Hilos”, que asisten 16 chicos locales. La profesora Liudmila Kovaleva centra nuestra atenciуn en una tendencia muy interesante: actualmente del oficio de tejedurнa se ocupan mбs varones que hembras.
— Para felicitar con el Dнa de Mujer a nuestra madres decidimos hacer regalos con nuestras propias manos...
Ademбs de eso, se puede asistir las clases de tejedurнa en la escuea local. Aunque para mantener el interйs hacia las tradiciones de Negliubka el programa de estudios tiene sуlo una hora acadйmica. “їNo le parece poco?” pregunto a la directora interina, Irina Kulaga.
— Es suficiente. Los expertos del ministerio de Educaciуn han diseсado el programa que tenemos que cumplir en la clase de trabajo. Claro que podrнamos cambiar la cantidad de horas de tejedurнa. Pero їpara quй? Tambiйn tenemos que enseсar a las chicas a cocinar y coser... En cuanto al oficio, para eso tenemos tres clases adicionales y una hora extraclase. Por lo tanto, ya obtuvimos buenos resultados. Este aсo la toalla –tejida por nuestras dos alumnas– ocupу el segundo lugar en el concurso nacional, “Kaliбdnaya Zorka”. Ademбs de eso, en las clases estamos aprendiendo la historia del arte de tejedurнa. Algunos chicos realizan investigaciones.
Es probable que todo pudiera ser diferente, si en Negliubka en los aсos noventa del siglo pasado no estuviera la sucursal de la fбbrica de artнculos de arte de Gуmel. Entonces fue abierto el complejo escolar de formaciуn y producciуn. Muchas graduadas se quedaban trabajar aquн. Pero luego el taller de tejedurнa fue cerrado por dejar de traer beneficios. їSi podrнa ser reabierto? Escuchй varias opiniones.
— Si las toallas tradicionales son demandas, la producciуn debe ser recuperada. En otro caso, no hay ningъn sentido trabajar aquн, asevera el vicepresidente del Gobierno de Vetka, Sergei Konchits. Nos damos cuenta de que este oficio puede ser demandado sуlo despuйs de ser llevada a cabo una buena promociуn. De este tema estamos ocupando ahora.
— Las tejedoras de Negliubka hacen artнculos exclusivos. Son obras hechas a mano, que no pueden ser comparadas con las toallas bordadas hechas en la fбbrica, asevera el director del centro provincial de arte popular de Gуmel, Nikolay Shemshenya.
A propуsito, gracias a los chicos, rushnikн son toallas conocidas en muchos paнses de Europa Occidental. Una vez sucedida la catбstrofe en la central nuclear de Chernуbyl, los jуvenes del municipio Vetka durante muchos aсos mejoraban sus salud en Italia, Alemania y Paнses Bajos y regalaban a sus nuevos amigos las toallas tradicionales belarusas.
En la provincia de Gуmel entienden que para recuperar en Negliubka el arte de tejedurнa, asн como mantener las tradiciones, hace falta en primer lugar presentar rushnikн en Belarъs y los paнses vecinos. Segъn la vicedirectora del departamento de cultura del Gobierno de Gуmel, Olga Antonenko, ya fue dado el comienzo a este asunto: el aсo pasado en Negliubka por primera vez tuvo lugar la fiesta provincial de rushnik belaruso.

Dmitry Umpirуvich
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