Lo confirma también su recién exposición personal en la Galería de Arte Belarusa de la Unión Belarusa de los pintores.
En su exposición personal Vasily Kostuchenko presentó una serie de los lienzos de los últimos años unidos por la concepción del llamamiento a la imagen de la persona en el mundo moderno. Debido a eso el proyecto tiene el nombre — “Habitantes de la Tierra”. Entonces, los héroes de la mayoría de las obras del pintor son figuras simbólicas privadas de los rasgos propios para los retratos — son soñadores con los ojos grandes de niños. El autor busca la imagen de la persona contemporránea la cual, a pesar de todos logros técnicos y el ritmo veloz de la existencia, encuentra en la vida el lugar para los sentimientos y la creencia, para sueños y el amor. El éxito del pintor Kostuchenko consiste en lo que él logró mostrarse como un autor moderno quien reacciona activamente a los acontecimientos y las tendencias del discurso artístico, pero al mismo tiempo se queda sentimental, lírico y a veces un creador profundamente íntimo.
Se puede decir con seguridad que el estilo del pintor Kostuchenko acierta a la onda mundial de “la nueva figuralidad”, en el cual se combinan los elementos del arte abstracto y el arte realista. De un lado, el principio figurativo en la obra del autor se subordina a los requerimientos formales de la composión. De otro lado, las manchas de colores en los lienzos de Kostuchenko no se convierten en los campos de colores abstractos sino conservan el enlace con la realidad : el verde se queda el color de la hierba, el color rojo — el sol, el azul transparente significa la pertenencia al fenómeno de agua. Precisamente esa realidad del color (como la sandía purpúrea jugosa en la obra “Verano”) añade a las imágenes de Kostuchenko lo pletórico, el enfoque visual eficaz.
Las obras presentadas en la exposición son diferentes por su humor: desde las tensas dramáticas (“Instante contenido”, “Crucifijo”, “Luz rosada”), basadas en la combinación de los colores contrastes, hasta las harmónicas moderadas (“Canción de cuna”, “Mañana blanca”), cumplidas en la tonalidad única clara. Sin embargo, el temperamento del autor se manifiesta más precisamente en las combinaciones dinámicas de colores ( el rojo con el verde, el verde con el rosado), cercanos a la estilística del arte contemporráneo. En este sentido, son demonstrativos las obras frecuentes del autor en el género nocturno (“Crepúsculo”, “Paisaje con la luna”). Pero la pintura de Kostuchenko se queda lejana del lenguaje llamativo de la publicidad, y los contrastes en los lienzos desde el punto de vista de la composición son harmónicos. En el aspecto de los colores y de las imágenes de las obras se adivinan los motivos de Chagall ( la estilización delicada de la inocencia, están presentes las figuras humanas multicolores, siluetas de los animales — de vacas y caballos), lo que demuestra la pertenencia del pintor a la escuela conocida de Vítebsk ( en el año 1974 se graduó de la facultad del arte gráfico de la Universidad Pedagógico de Vítebsk).
Por supuesto, presenta el interés también la serie fresca de los paisajes urbanos de Kostuchenko (“La Ciudad 1,2”, “El Eco de la Ciudad”, “Al Lado del Templo”), en los cuales el autor captó delicadamente y supo reflejar de manera original el espíritu de la capital belarusa. Esas pinturas se caracterizan por el humor positivo en la reflexión del aspecto de la megalópolis, la sensación de la energética hirviente jóven de la ciudad. Esta serie es un aporte real en la elaboración de la marca artística de la ciudad de Minsk.
Una página aparte en la obra del autor ocupan los lienzos del tema cristiana (“La Comunión”, “El Día de los Difuntos”, “El Encuentro”), los que recuerdan las obras maestras conmovedoras del la pintura popular de iconos. El autor refleja en estas obras no tanto el orden religioso como la concepción del mundo mitológico de los pueblos eslavos basada sobe el calendario agrario con el ciclo anual de las fiestas. El pintor recrea la atmósfera sacral inimitable de cada una de ellas (en particular, se percibe en las obras) "El Presentimiento de la Pascua 1,2”, “La Navidad”, “El Días de los Difuntos”).
Las obras de la pintura de Kostuchenko de los últimos tiempos se caracterizan por los formatos grandes (“El Flotador”, “Ponti Pilat y Jesús”, “El Presentimiento del Encuentro”), lo que recuerda la experiencia de los representantes del expresionismo abstracto con su aspiración a disolverse en el elemento de la pintura.
Uno puede hablar mucho sobre lo conceptual de las obras de Vasily Kostuchenko. Recuerdo su exposición “El Signo del Agua” en el Museo Contemporráneo de Artes Plásticos de Minsk.
Sí, que el agua es una de las materias vivificadoras del Universo. Sin ella no huebiera la vida en la Tierra. Nó, Vasily Kostuchenko no se ha encargado de reforzar esta verdad. En su ciclo creador él solamente a su manera interpretó la fuerza vivificadora de la Naturaleza. Pero en aquel entonces la exposición de Vasily Kostuchenko causó el efecto del aguacero en el tiempo cuando hace sol. Eso fue tan inesperadamente. Y al mismo tiempo imprevisible. El autor con sus obras hizo abrir los ajos más apliamente ante el equivalente más importante de la realidad.
El agua es una categoría global. La humanidad se dió cuenta de su valor. Y dió la señal de alarma. Los científicos son preocupados por el deshielo en los polos de la tierra: el agua se va… En Belarús hay muchos lagos y ríos con el agua dulce, yace en el subsuelo. Algunos países son ricos en petróleo, gas, carbón. Nuestra riqueza es el Agua. Y Vasily Kostuchenko decidió demostrarlo, subrayar a tiempo. El valor del agua se muestra en el contraste con el calor. A propósito, el calor extraordinario hace un año, con los incendios de bosques, la sequía dió impulso al pintor crear una serie de obras sobre el agua como el símbolo de la vida vivificador.
El autor nota el significado del agua en la realidad cotidiana. Pero simplemente por el nombre sencillo de una de sus pinturas “La Gente que Bebe el Agua” elevaba el objeto de su creación. Vasily Kostuchenko solamente de manera suave señalaba el hecho de que el elemento de agua es como nuestra vida imprevisible.
Según Vasily Kostuchenko, el agua es la categoría moral. Cuidando esta realidad natural la persona muestra su atención pensando en la supevivencia de las generaciones futuras.
Por supuesto, todas sus ideas el pintor expresa en el arte de la pintura. Las obras de Vasily Kostuchenko hacen sentir que para el autor es importante encontrar su ánimo, determinar la esencia de la naturaleza humana, revelar las reglas de las relaciones con el medio ambiente. En las obras dirigidas al espectador pensativo Vasily pinta el mundo con la ayuda de las asociaciones de la vida ordinarias. Pero él invisiblemente supera la materialidad y hace encender la subconciencia de los interlocutores a distancia.
Sí que mucho se basa en la percepción. Y solamente la tangibilidad del objeto puede generar aquellos u otros pensamientos, emociones, permitirá hablar sobre la línea de la creación en base de lo visto y asentado en el alma. En caso con Vasily Kostuchenko eso sucedió después del conocimiento con el mismo autor.
— No obstante, quisiera aclarar qué aporta usted a su obra creativa? Es que el pintor no siempre pinta simplemente una cosa la cual está viendo ahora, hoy.
– Considero que el pintor, el poeta, el escritor son todos las personas cercanas espiritualmente, solamente cada uno de ellos se expresa de manera distinta. A menudo pienso en esta cuestión. ¿Por qúe en algunas ocasiones uno tiene lo que decir, y en las otras no tiene? La profesión del pintor es su destino. Por que la persona quiere presentar a la gente la idea fresca. El pintor está impulsado por el interés a la realidad. Y mis exposiciones “El Signo del Agua”, “Los Habitantes de la Tierra” es mi actitud al mundo. Nadie da el tema al pintor simplimente así. El reflexiona, piensa, llega a alguna conclusión y los expresa en sus obras. El arte ha sido siempre, más o menos, sino ha existido siempre. Y cuanto más diverso es, tanto más interesante. Imagino el arte como un organismo vivo grande. A éste se pega una cosa u otra, pero lo mal se perderá, se quedará los bueno. Personalmente yo considero que hay que conservar a su personalidad y quedarse por sí mismo. Y si vas a ocuparse con tu oficio cómo lo sientes, si sale algo sensato, entonces será interesante para otros. Sí, entiendo que los espectadores no siempre perciben lo que he querido decir. Pero con más frecuencia entienden y aceptan. Se le gusta eso.
— Es importante para usted la participación en las exposiciones?
— Desde luego. Es que cómo nos comunicamos? Solamente a través de las exposiciones.
— Sus obras son ejecutadas en la manera la cual no puede ser denominada totalmente realística, aunque usted, como cualquier pintor, sin duda, sabe reflejar los que ve en la forma realística. Por qué usted ha dejado el realismo aparte y encuentra otras formas de expresarse en sus obras?
— Y qué es realismo? Voy por la calle, veo el bosque, percibo el olor, camino por la tierra...Estoy de algún humor, tengo algunas emociones en el alma. Si tomar la foto del bosque será simplemente un bosque. Pero además de lo aparente hay alguna cosa más en la naturaleza. Además de la sensación de los visto hay la sensación de las asociaciones. Todo depende de lo qué quieres hacer. Quieres pintar la felicidad? Pero es la categoría invisible aunque, sí, que hay. Por qúe no hacerlo? Hace tiempo me aproximé al tema del agua con mucho realismo. Y cómo reflejar las relaciones entre las personas? Vemos que están sentadas dos personas. Están sentadas y se sienten agradable. Por qué no puedo pintarlo? Es que las pinturas y alejan y acercan. Cómo comprender el realismo? Considero que es imposible repitir lo que vemos. Se puede acercarse, encontrar algo nuevo en eso. Es imposible simplemente copiar la naturaleza.
— Cuál es la imágen que une todas sus obras?
— Probabmente se quiere transmitir cómo yo mismo siento la situación, como la percibo. Ahora estamos sentados con usted, estamos hablando, pasó el coche, cayó la pluma. Eso es el tiempo. Se quere mostrar el tiempo donde vives. Y los temas es el pretexto para las reflexiones. Pero no es lo importante. Lo importante es que el pensamiento sea profundo, que tenga algún peso.
— Considera usted que la obra debe ser bella?
— No es obligatoriamente. Una persona me dijo: tus obras son muy bellas. Para él es bello, pero considero que todavía no son perfectas. ¿Qué uno entiende en el concepto “bello”? Para mí “bello” es la armonía de las pinturas donde no hace falta cambiar nada. Es dónde precisamente has acertado. Pero es una cosa. Por segundo, lograr que los otros entiendan lo que pienso. Significa mucho tener el sentido de la composición y el sentido del ritmo. Es estupendo pero todavía no es lo todo. Muchos pintores se quedan sin ser notados por que no tienen la costumbre de trabajar independientemente.
— Usted participaba en las exposiciones, iba con sus obras al extranjero. ¿En cuánto es útil esa experiencia?
— Considero que seremos interesantes cuando estemos idiosincrásicos.
— Qué hay en sus planes creativos? O Usted considera que ya ha conseguido en su creatividad el límite y para usted no le hace falta romperse la cabeza sobre nada?
— Mi opinión es la siguiente: si la persona considera a sí mismo un creador no está mal. El esquema, las cosas aprendidas de memoria no dan el resultado sensato. Hay que perfeccionarse constantamente, buscar, luchar y no ser indiferente. La persona se ha apuntado en alguna dirección y se desarrolla en eso. Hay que trabajar. Estoy seguro que no hay límites para perfeccionarse. Qué quisiera? Simplemente manifestarme más sobre sí mismo en mis trabajos.
Algún crítico dijo una vez: “El lado fuerte del “pintor eslavo” es la incertidumbre…”. La incertidumbre, la falta de la comprobación racional, el deseo de conocer el mundo circundante en el nivel emocional — precisamente estos rasgos son en primer lugar propios a este pintor. El aprecia más el conocimiento incompleto que la completicidad de sus opiniones. Y allí donde el pintor “se libera” de la “composición” racional del lienzo, es fácil ver los matices impulsivos de las manchas de colores jugosos — el tejido de la fábula casi se disuelve, pasa la difusión original donde en la medida completa se manifiesta su Majestad la Pintura.
Además Vasily Kostuchenko es de la generación de aquellos pintores belarusos los cuales lograron evitar la influencia de la tradición pseudoacadémica. “ No se pierde la figuralidad en sus pinturas, lo más probable adquiere nuevo sentido: la misma “se acierta” en el contenido de la composición como un componente pintoresco orgánico. La saturación del lienzo con las manchas de colores locales puede provocar algunas alucinaciones con la pintura de los fovistas, sin embargo, veo otra motivación: la asimilación de la experiencia europea, de un lado, y del otro lado, la realización de tales posibilidades las cuales no pueden ser dadas por la experiencia de la pintira académica”, — así escribe sobre la creatividad de Vasily Kostuchenko el especialista de atre Nikolay Pogranovsky.
Hay que destacar una peculiaridad más de la manera creativa de Vasily Kostuchenko. En sus obras el elemento de pintura se retiene a veces por un color local — con más frecuencia es el rojo. Las gradaciones del color rojo pueden variarse sin límite y paulatinamente “verterse” de un lienzo a otro. La expansión del rojo es el diapasón original en muchas obras de pintura. A veces se percibe como alguna serie que da al pintor la oportunidad de abrir gradualmente “el tema del rojo” en diferentes.
— Qué, según su opinión, generó la situación cuando hoy no mucha gente se interesa con la pintura?
— Siempre ha sido así: no muchos se interesaban con el arte. Es que simplemente así está creado el mundo.
— En cuánto el pintor contemporráneo, que debe y crear, y vivir en eso tiempo, va al compromiso entre la realización de su producto y entre la creatividad como tal en la cual Usted, probablemente, no deba tomar en cuenta al espectador como al consumidor?
— Este tema es muy complicado. A veces intento crear para el consumidor. No entiendo cómo es hacer mal para el consumidor?.. El coautor con el cual creabamos el catálago de los pintores belarusos, dijo hay que encontrar cómo tomar al espectador, con qué interesarlo. Cada uno lo hace de su modo. Para conseguir en entendimiento. Pero en cualquier caso, el espectador no preparado percibe solamente lo que ve. Algo nuevo, eso ya es inhabitual.
— Ha pensado quién es Usted para el espectador? Es que la forma debe combinar también el sentido.
— La pregunta consiste en qué es el comercio y qué es el arte? Vender es simplemente un trabajo o es una puntura, son dos cosas distintas por completo. Se puede vender cualquier trabajo. Simplimente hay que saber vender, que alguien se ocupe contigo, te haga.
— Y qué tal los criterios de las valoraciones que son determinadas por las ventas de subasta?
— Las obras de los pintores belarusos también participaron en las ventas de subasta.
Ordinariamente,se dedican al pintor cuando quieren ganar por su cuenta. El pintor no tiene que ver con eso. Y lo que ahora en el Sotheby’s se ocupan con el arte el cual no valía nada antes, se explica por lo que simplimente llegó la hora. Es probable que lo que estamos haciendo ahora se convierta en lo valioso luego. En 20 — 30 años. Ya no hay pintor, pero se desenvuelve un período absolutamente otro: aparece el interés hacia sus obras. Por supuesto, hay criterios para la valoración. Hay muchos pintores desconocidos no por que pintan no interesante, sino por que son mostrados raramente.
— Se puede afirmar hoy que los pintores belarusos se declaran sobre sí causando la impresión brillante en el mundo?
— Por qué no? Tenemos a los tales. Por ejemplo, Zabórov hizo conocer sobre sí. Chagall? Cuando vino a Alemania trajo un vagón de las obras, pero no eran necesarias. Le apoyaron solamente en Francia. Es el destino, es la suerte. Si has acertado con el comprador, entonces te ha ayudado. Cada uno tiene la posibilidad…
— En qué medida se puede hablar hoy sobre la escuela de la pintura belarusa?
—Visité muchos lugares: en Alemania, Suecia, Luxemburgo, Francia. No parecemos mirlo blanco. Hubo tiempo cuando Moscú causó una influencia grande. Constantamente ibamos a Vilna cuando eramos jóvenes: allí el arte era moderno y muy interesante. Tenemos muchos establecimientos de educación. Me visitaba un pintor de la provincia de Novgorod, allí tienen una escuela técnica profesional pero el territorio es como Belarús. Nosotros tenemos la Escuela.
— Usted fue el laureado del Premio Especial del Presidente en la nominación “Artes plásticos”…
— Sí, el premio por el aporte en el desarrollo del arte belaruso. Tuve el año fructífero. Participé en la decoración de la Biblioteca Nacional, la actividad relacionada con la exposición fue intensiva.
— Qué le da la alimentación adicional para la creatividad? Son sus obras basadas sobre la vida de este país y sus peculiaridades nacionales? O se puede decir que usted es un pintor internacional?
— Independientemente de nuestros deseos y palabras, nuestra educación se basó en los maestros de artes plásticos: sobre la creatividad de los pintores populares Mikhail Savitsky, Leonid Schemelev, Gavriil Váschenko...Lo hemos visto desde la infancia. Eso dejo su huella. Pienso que cambiar algo es complicado. Sí, que comenzamos viajar al extranjero con más frecuencia, nos hicimos más abiertos. Por supuesto, haces una circunvisión al arte internacional. Pero, desde luego, más de todo obtienes en Belarús, por que aquí vives, ves todo. Y los temas nacen aquí. Y si hablamos de los estudiantes de 20 años, ellos tienen los raíces, pero tengo miedo de que se pierda el enlace de las generaciones. Temo mucho por eso. Al entrar a la Unión de Pintores pensabamos: saldrá todo. Ahora hay poca creencia en los pintores jóvenes. No digo que no son capaces, aun muy capaces. Pero hay que ocuparlos de algún modo, darles la oportunidad de creer en sus fuerzas. Para que se consoliden en la sensación de ser necesarios.
— Quiere decir que le preocupa el problema de la conservación de las tradiciones?— Desde luego. Y las tradiciones es cuando ayudan a los jóvenes. Debe ser así. Ellos y nosotros.
El pintor, con la comprensión idiosincrásica del mundo, con su filosofía creativa. Esta definición conviene muy ciertamente a Vasily Kostuchenko. Y las exposiciones le caracterizan como al pintor que no es indiferente a la vida. La realidad en sus obras tiene muchas gradaciones, matices, detalles. No es en vano, y en “El Signo de Agua” cada pintura fue el fragmento del ciclo único en el cual se comprendía el concepto de la armonía del Mundo. Pero el absoluto no es la verdad fija. Bajo éso él comprende el mundo en total. Otra cosa es que con la ayuda de la pintura aspira a expresar su actitud al mundo. En eso consiste la posición creativa del conceptualista Vasily Kostuchenko.
Viktor Mikháilov
