Нoy en dнa, en la vida espiritual de la capital belarusa un lugar muy especial ocupa la Casa de la Misericordia de Todos los Santos de la parroquia ortodoxa Al parecer, todos los vecinos de Minsk hayan oнdo y conozcan el complejo espiritual y social situado en los bellos entorno de la Biblioteca Nacional de Belarъs. A partir de su inauguraciуn y consagraciуn ya pasaron diez aсos. Por lo tanto, es muy lуgico que haremos los primeros balances.
El tiempo pasу volando, se alegra, o lamenta el principal autor del proyecto, el abad de la parroquia ortodoxa de Todos los Santos de Minsk, arcipreste, Fiodor Povny.
Pues porque cada dнa y noche fueron llenados con las obras espirituales. El sacerdote logrу reunir a su alrededor a la gente partidaria, como se suele decir a esta altura. En resultado, lo planeado no sуlo fue cumplido, sino, lo que subraya el padre Fiodor, fue llevado a cabo de hecho por primera vez. Es mбs: el mismo fue lleno del sentido aъn mбs profundo y fueron propuestas las nuevas directrices de desarrollo del proyecto.
Hace falta rendir merecido tributo, el sacerdote no oculta: ha sido y hay muchos escйpticos. Y tal vez el reproche mбs comъn se traduzca en que el complejo creado en un rincуn apartado –que recibe para rehabilitar incluso a los ciudadanos acomodados– se parece a un juguete y estб lleno de los cuartos hermosos y confortables con modernos equipos mйdicos que atienden los profesionales altamente calificados. Debemos reconocer que el padre Fiodor responde a las preguntas directas, incluso las mбs “inconvenientes”. Segъn el sacerdote, al principio la idea de crear un hogar fue pensada como la oportunidad en primer lugar de ayudar a aquellas personas que habнan entregado a la sociedad su trabajo, talento y aсos de vida. Pero aquн nunca olvidan de los rasgos tan importantes, como humanismo, compasiуn y misericordia y en un sentido social mбs amplio. El nъcleo de la actual Casa de la Misericordia es el centro mйdico de rehabilitaciуn social, “Eleos”. “Eleos” es la antigua palabra griega que significa la caridad. Eleos es el parche, aceite a la herida que ayuda a las personas que la requieren. Al mismo tiempo, subraya el padre Fiodor, la Casa de la Misericordia no sуlo es un hogar de ancianos. Aunque entre los pacientes hay muchas personas de la mayor edad. “Sabe, a su tiempo nos quedamos gratamente sorprendidos y ahora puedo reconocerlo como el resultado de nuestro trabajo: hay dos estados de бnimo, con los cuales la gente abandona nuestro centro. Unos dicen: yo merezco este respeto, atenciуn y actitud por toda mi vida, es decir, la he vivido por algo. Otros dicen: ahora yo sй, cуmo seguir viviendo. Cuando escuchas algo parecido de una persona de 90 aсos de edad, te sientes una sincera alegrнa por tн mismo y por todo nuestro hogar”.
El logro mбs importante de las experiencias acumuladas durante diez aсos el padre Fiodor cree aquel hecho de que un paciente del centro de rehabilitaciуn, si lo desea, siempre tiene posibilidad de relacionarse con un sacerdote y contarle todas sus penas, pedir consejo y obtener ayuda espiritual, lo que es muy importante. Pues aquн se presta la ayuda mйdica, social y espiritual: el proceso de rehabilitaciуn tiene que unir todos estos componentes muy importantes. El йxito de este mйtodo estб confirmado tambiйn por el personal mйdico que trabaja en el centro. Es mбs, no sуlo cuando se trata de las personas de la mayor edad o muy enfermas, sino de los jуvenes, pues ellos tambiйn necesitan de apoyo espiritual y moral.
En general, en los ъltimos aсos, el centro mйdico de la Casa de la Misericordia ha aumentado el nъmero de sus pacientes. Si anteriormente en su mayorнa han sido los veteranos de la Segunda Guerra Mundial, a esta altura cada vez mбs crece el nъmero de pacientes que nosotros llamamos los veteranos de trabajo, asн como los soldados participantes de la guerra en Afganistбn y sus esposas, pues ellos tambiйn han llegado a la edad, cuando se necesita la ayuda mйdica y social e incluso a veces la asistencia espiritual . En resultado, de modo rбpido se estбn desarrollando las formas de cooperaciуn con los servicios pъblicos sociales y medicinales, en primer lugar, de la ciudad de Minsk. La Casa de la Misericordia es el ejemplo de la cooperaciуn que ya es toda una norma para Belarъs, cuando la iglesia y sociedad no se limitan sуlo con sus intereses humanitarios, sino tambiйn se unen todos los esfuerzos para lograr un resultado comъn y necesario. Por lo tanto, la Casa de la Misericordia se convirtiу en una especie de plataforma experimental, en la cual se perfeccionan los nuevos modelos prбcticos del concepto social de la iglesia, asн como las formas de la cooperaciуn de las estructuras religiosas y gubernamentales.
Todo el mundo sabe que la semejante casa no puede estar basada sуlo en el entusiasmo de las personas involucradas en este asunto. Para muchos profesionales, el empleo en el centro mйdico es el puesto de trabajo principal y ъnico, por lo tanto, hay que pagarles salario, pues tienen que vivir y mantener a sus familias. Como la Casa de la Misericordia estб existiendo debido a las donaciones de la gente, debe ser creado un adecuado sistema de organizaciуn. Pero segъn subraya constantemente el padre Fiodor, el centro “Eleos” se diferencia de cualquier otro centro privado, pues el mismo no tiene su propietario que desea obtener sus propios dividendos. Pero hay abad que hace todo lo posible para ayudar al centro a obtener equipamiento mйdico y materiales necesarios, lo que le permite funcionar de modo eficiente y atender a los pacientes.
Ademбs del centro de rehabilitaciуn en la Casa de la Misericordia seriamente se ocupan del apoyo social de los represenantes de las capas desprotegidas socialmente: discapacitados, huйrfanos y personas gravemente enfermos y ancianos. Tambiйn el padre Fiodor estб muy orgulloso de modo, cуmo estб organizado el trabajo con los jуvenes. Es mбs, no sуlo con las aquellas personas que crecieron en la misma parroquia. A la Casa de la Misericordia vienen los jуvenes desde diferentes partes de Minsk. Por lo tanto, mucha importancia tienen las clases de la escuela abiertas directamente en la Casa de la Misericordia. No se trata de la Escuela Dominical (lo que es algo muy natural), es decir, la escuela primaria: sуlo con las formas ortodoxas de la educaciуn segъn las mejores tradiciones del pueblo belaruso. “En realidad, formamos parte del sistema de educaciуn oficial, poniendo la tarea de ningъn modo no impedir a enseсar las disciplinas obligatorias de la escuela primaria, comparte sus experiencias el padre Fiodor. Y al mismo tiempo damos clases de la cultura cristiana. A esta altura a menudo se estб analizando este tema: en la sociedad, asн como en nuestra iglesia, a veces incluso nosotros tenemos que enfrentar los intentos muy agresivos en cuanto a la introducciуn en el programa de estudios de los elementos de la cultura cristiana. Nuestras experiencias demuestran que de ninguna manera debe ser utilizada ninguna presiуn. Sуlo el deseo real de los estudiantes y sus padres. En resultado, hoy tenemos oportunidad ъnica de formar la imagen espiritual de la joven generaciуn. Los primeros graduados de nuestra escuela primaria ya estбn a punto de recibir los certificados de la educaciуn secundaria. A esta altura, nadie se les obliga a asistir a las misas y llevar una activa vida espiritual o religiosa. Pero el hecho de que estos niсos por su voluntad asisten a las misas y son participantes muy activos tambiйn de nuestro grupo de jуvenes y de todas las actividades –celebradas en la iglesia– sin duda nos agrada y da esperanza. Sabe, ya no son mis observaciones, sino de aquellas personas que los ven en la vida laica, en la escuela: con nuestros chicos se puede contar en las situaciones mбs complicadas.
A veces hablo con estos niсos que son casi adultos y oigo las palabras muy agradables: las experiencias –obtenidas tras estudiar en la escuela en la Casa de la Misericordia– son mejores que ellos han tenido en su vida y hasta ahora siguen viviendo de aquellos recuerdos y de aquella vida realmente hermosa... Estoy seguro de que nuestros chicos traerбn muchos beneficios a nuestra sociedad”.
Claro que la casa –en donde quieren tanto a los niсos– debe dispone de buena biblioteca. Actualmente en la colecciуn de la Casa de la Misericordia permanecen en torno a ocho mil libros no sуlo religiosos, sino tambiйn de la literatura laica. La parroquia de Todos los Santos no es sуlo la Casa de la Misericordia y el centro de rehabilitaciуn, sino tambiйn es el Templo monumento a todas las vнctimas inocentes de nuestro paнs. A esta altura se estбn concluyendo las obras de su construcciуn. Ya fue abierta la cripta para que los interesados puedan visitarla los sбbados y domingos. Esos dнas siempre hay muchas personas –creyentes y turistas– que desean ver obra ъnica de nuestro paнs. Ademбs de eso, de modo muy eficiente estб funcionando el taller de pintura de iconos y la cooperativa de costura, en donde estбn cosiendo las vestimentas, incluso de lino. Tambiйn los artesanos locales aprendieron las prбcticas de la costura de los elementos de vestimentas religiosas verdaderamente ъnicas de la paja belarusa de color dorado. Por ejemplo, pueden hacer de la misma la mitra. Estas prendas ъnicas muy brillantes ya durante tres veces fueron expuestas en las salas del Museo Nacional de Bellas Artes. Y como el mayor reconocimiento suenan las palabras del director de Louvre escritas en el libro de visitantes de honor, una vez celebrada una de estas presentaciones: “Para mн serб todo un gran honor, si estos artнculos algъn dнa serбn puestos en las paredes de Louvre”... Esperemos que dentro de varios aсos, todo serб asн. ЎQuй Dios bendiga a las personas que se ocupan de esta obra noble.
Galina Ulбnskaya
